Tras una desastrosa preparación previa, tanto McLaren como Alonso han quedado fuera de la participación en las 500 millas de Indianapolis, la cual tendrá lugar con los 33 clasificados, los 3 últimos elegidos en una sesión a todo o nada disputada ayer.

EL DESASTRE TIENE NOMBRES: MCLAREN, CARLIN…

Las sesiones de entrenamientos libres celebradas la pasada semana, sumado al potente accidente sufrido por Alonso, dejaron el peor presagio sobre la participación del asturiano en la mítica prueba estadounidense. Un McLaren que ha pecado de inexperto que subestimado a una de las pruebas más complicadas de todo el circuito del deporte del motor.

La unión con Chevrolet tras el veto de Honda, el apoyo logístico de Carlin, constructor de la zona baja de la tabla en la Indy, algo unido al altísimo nivel de la parrilla y la falta de preparación y kilometraje han completado un desastre anunciado por pocos y temido por muchos: que Alonso no se clasificara para la carrera del próximo 26 de mayo.

PAGAR POR LA PLAZA, DESCARTADO EN MCLAREN

Como ya vimos en 2011 tras la eliminación prematura de Hunter-Reay, él y su equipo junto a su potente patrocinador, DHL, compraron una plaza que evitó el desastre del piloto, el cual tuvo que partir en última posición, pero al menos pudo participar. Pese a la fuerte rumorología de que McLaren buscaría una plaza para Alonso, fuentes cercanas a Zak Brown habrían confirmado que el propio asturiano habría declinado dicha opción.

“Si no pasamos es que no lo merecemos”, expresaba un Alonso con rostro cariacontecido tras su eliminación en la sesión de clasificación oficial, la cual le enviaba al ‘Last-Row’, una competición entre 6 pilotos entre los cuales solo 3 accederían al desarrollo de la prueba final.

O’WARD, PILOTO RED BULL, TAMBIÉN FUERA DE LA PRUEBA

Tras la intensa lluvia, la sesión se demoró a las 22,30 hora española. Alonso realizaba un buen registro pero que acabaría siendo insuficiente puesto que en el último momento, Kaiser, del Juncos Racing, mejoraría en 0,019 mph al asturiano dejándole fuera, al menos este año, del sueño de conseguir la triple corona.