Los resultados tan abrumadores del rookie de Moto3, Pedro Acosta, han provocado que muchos periodistas y aficionados le apoden como «el nuevo Marc Márquez». Sin embargo, esto puede suponer una presión mediática extra para el piloto, que podría afectarle en sus próximos resultados en la categoría.

Ni Giacomo Agostini, ni Ángel Nieto, ni Valentino Rossi, ni el propio Marc Márquez, lograron romper las barreras que ha roto Pedro Acosta. El piloto del Red Bull KTM Ajo se ha convertido en el piloto más joven en lograr tres victorias consecutivas, así como el único en la historia del mundial de motociclismo que encadena cuatro podios en sus cuatro primeros grandes premios. Todo esto después de que terminara segundo su primera carrera de Moto3. Todo a la edad de 16 años y 342 días. Una barbaridad.

Es debutante, pero no lo parece. Como diría Marc Márquez, «de rookie poco». Es líder del Mundial desde la segunda carrera del año y ya le saca 51 puntos al segundo, Niccolò Antonelli. Poco a decir. Sus logros hablan por sí solos. Este fin de semana aterriza en Le Mans con dos carreras de ventaja, una diferencia con el segundo que no se había visto nunca ni en Moto3 ni en 125cc desde que se introdujo el actual sistema de puntuación en el año 1993.

‘El tiburón de Mazarrón’ – así es como le llaman desde las categorías inferiores – es sin duda alguna uno de los diamantes más puros y espectaculares que nos ha dado el Mundial de MotoGP en los últimos años. Inigualable. Probablemente un prodigio. Todo esto hasta el punto de llegar a ser bautizado por muchos como «el nuevo Marc Márquez». Ya vimos algo parecido con Fabio Quartararo en el FIM CEV Repsol. Pero ‘El Diablo’ no fue capaz de soportar esa presión mediática y los resultados empezaron a empeorar con su llegada a la categoría de Moto3. Eso nos hace reflexionar: ¿valdrá la pena comparar a pilotos? ¿Podría pasarle eso a Acosta? ¿Podría la presión mediática jugarle una mala pasada?

Ya se lo decía Márquez en la rueda de prensa del GP de España: «Que no te afecte la presión, ahora disfruta y ya está. La gente se piensa que tienes que ganar todas las carreras». En la rueda de prensa, el ocho veces Campeón añadía:  “Yo creo que puede ganar el título ya en su primer año, pero lo que debe hacer ahora es divertirse, pasárselo bien y lo que deberíamos hacer los demás es dejarlo tranquilo y no añadirle presión.» Marc sabe de qué habla.

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De momento Acosta parece sentirse muy cómodo encima de la Moto. Mantiene la calma. Cero presión. O eso es lo que nos hace ver. Según mi opinión, como debería ser. Ya hemos visto en el pasado las malas vibras que transmite a los pilotos la presión. La mente juega malas pasadas. Caídas, malos resultados y, en el peor de los casos, lesiones. En vez de compararlos, deberíamos disfrutarlos. Disfrutar de cada momento que nos brindan. De la emoción que encontramos en cada curva gracias a ellos. Y desear que eso no se acabe. No le apaguemos la luz a un piloto de tan solo dieciséis años. Pensemos en las buenas batallas puede brindarnos durante, esperemos, su larga trayectoria.