Dada la no asistencia de Marussia ni Caterham al Gran Premio de los Estados Unidos de este fin de semana, los responsables se reunieron excepcionalmente para cambiar el procedimiento de eliminación en la sesión de clasificación. Sebastian Vettel podría no participar en la sesión y agravar así el problema de falta de coches.


Después del anuncio de los equipos de Fórmula 1 Marussia y Caterham de que no asistirían a las pruebas que se disputasen en América, la lista de competidores publicada este jueves por la FIA incluye únicamente dieciocho coches. Esto significaría que, reglamento en mano, en la Q1 tan solo serían eliminados dos pilotos.

Vista la situación, los comisarios responsables del Gran Premio se reunieron ayer jueves y decidieron cambiar el reglamento. En la sesión de sábado serán eliminados los cuatro últimos pilotos de la Q1 y tan solo los cuatro últimos de la Q2, manteniendo la Q3 intacta, donde los diez pilotos restantes lucharán por la pole position.

La decisión también ha venido marcada por una posible penalización a Sebastian Vettel. Red Bull Racing ya expresó que seguramente tendrían que usar una sexta unidad de potencia para el piloto alemán después de agotar el límite de las cinco reglamentarias. La penalización por hacer un cambio de unidad de potencia es de diez posiciones en parrilla, pero el piloto también ha agotado el límite de los otros cinco elementos que la componen y una substitución extra de todos ellos comporta tener que salir desde el pit-lane.

Si esta fuese la decisión tomada, sería inútil que Vettel tomase parte en la sesión clasificatoria y presumiblemente no lo haría para ahorrar componentes. Así pues, probablemente este fin de semana tendremos una sesión clasificatoria de sábado con tan solo diecisiete coches sobre la pista del Circuito de las Américas.