Los actuales neumáticos limitarán el desarrollo de los monoplazas de 2021. Tanto que se introducirán pequeñas modificaciones en el reglamento para garantizar el correcto funcionamiento de los Pirelli.
Pirelli, la marca italiana que suministra de forma exclusiva los neumáticos la Fórmula 1, diseñó unos compuestos pensados para soportar cierta carga aerodinámica. En el momento de su fabricación eran conscientes que estos niveles aumentarían con el paso de los años. No obstante, contaban con que la introducción del nuevo reglamento sería efectiva en 2021.
Que la nueva normativa llegue en 2022, junto con los neumáticos de 18 pulgadas, afecta también a Pirelli. El próximo año los monoplazas apenas sufrirán cambios, pero se espera que generen más carga aerodinámica conforme los equipos evolucionen sus coches.
Todo esto ha hecho saltar las alarmas, pues la marca italiana no contaba con llegar a tales niveles de downforce. Es decir, los neumáticos actuales no están preparados para soportar un monoplaza en 2021 con el actual reglamento, siendo necesario reducir la carga creada especialmente en curvas rápidas.
Nuevas restricciones en el fondo plano a petición de Pirelli
Al trasladar este inconveniente a la FIA, esta se ha puesto en contacto con los equipos para encontrar una solución conjunta. Así, se ha decidido modificar ligeramente el fondo plano, en la zona anterior a los neumáticos traseros.
Ese espacio es ahora una zona de estudio para ingenieros y aerodinamicistas, pues se puede conseguir ventaja añadiendo y modificando ranuras al fondo plano El año que viene la situación será diferente. Por normativa quedará prohibido trabajar esa zona, además de recortarse en anchura.
Estas medidas supondrán una pérdida de 0.5 segundos por vuelta, que es lo que se espera que un equipo mejore durante el invierno. De este modo, los monoplazas de 2021 serán ligeramente diferentes pero igual de rápidos, garantizando el buen funcionamiento de los neumáticos.
¿Cuál es la utilidad de las ranuras del fondo plano?
Un neumático al girar genera aire en el sentido de su movimiento. Con un fondo plano completamente sólido, este aire choca con el que produce el monoplaza al desplazarse, y que va hacia atrás.
Abrir algunas ranuras justo delante de lo neumáticos traseros permite liberar el exceso de presión de aire inducida alrededor de los bordes del fondo causada por el neumático que gira.
A medida que el aire movido por la rueda se encuentra con el aire que viaja bajo el fondo plano se crean vórtices. Esto afecta al flujo de aire que llega al difusor, lo que limita a su vez su utilidad. En definitiva, cualquier elemento que reduzca el flujo de aire bajo el monoplaza perjudicará a la carga aerodinámica capaz de crear.
Por ello los equipos han comenzado ha crear ranuras, permitiendo que el aire que genera el neumático tenga otro sitio al que ir, manteniendo el flujo que llega al difusor prácticamente limpio.
Sin embargo, esto cambiará en 2021. Por ello los equipos buscarán reinventarse, hallando la forma de compensar la carga aerodinámica perdida en ese punto del coche.
¿A quién afectará más esta nueva normativa?
Esta medida afectará sobre todo a los monoplazas con mayor rake (inclinación o ángulo formado entre la zona anterior y posterior). Se debe a que la carga aerodinámica que se crea es el producto del área del fondo y la presión de aire.
Los diseños con poco rake tienden a tener fondos con mayor superficie para compensar el hecho de que su ángulo más plano con el suelo no genera tanta presión. Para los monoplazas con este tipo de diseño quitar las ranuras no será tan perjudicial.
Con esta nueva normativa, quizás no sea conveniente tener tanta inclinación, o quizás aparezcan nuevos elementos aerodinámicos. En cualquier caso, el año próximo veremos a los equipos reinventarse.