La FIA celebró ayer el evento que clausura el año automovilístico, haciendo entrega de los trofeos que coronan a los respectivos deportistas como campeones del Mundo en las disciplinas que ampara la Federación.

El evento se celebró en Bolonia, contraprogramando al Mundial, lo que mermó su repercusión y seguimiento. Además, el presidente de la FIA Mohammed ben Sulayem no dudó en erigirse como protagonista de la noche generando polémica en el escenario junto a Christian Horner.

Los premiados por la FIA.

Unas tres semanas después del final de la temporada 2022 en Abu Dabi, la ciudad de Bolonia y el Automobile Club d’Italia acogieron la ceremonia de entrega de premios de la FIA, en la que Verstappen recogió formalmente su trofeo, mientras que Red Bull recuperó el premio de los equipos.

Charles Leclerc y el compañero de equipo de Verstappen, Sergio Pérez, también estuvieron presentes para recoger los respectivos trofeos P2 y P3, junto con una serie de estrellas de otras disciplinas del automovilismo que disfrutaron del éxito este año.

Verstappen dijo que su segunda victoria en el campeonato fue «muy diferente a la primera».

Verstappen explicó: «Creo que el primero fue muy emotivo porque es para lo que trabajas toda tu vida y una vez que logras el primero… Creo que, los momentos como ese sólo se pueden comparar con tu primera victoria en una carrera de Fórmula 1, incluso con tu primera pole position. Los que consigues después son diferentes, son bonitos, pero esa misma emoción nunca la volverás a experimentar.
Christian Horner, por su parte, dedicó la victoria de Red Bull en el campeonato de constructores al fundador del equipo, Dietrich Mateschitz, fallecido en octubre.

«Me gustaría dedicar este campeonato, este trofeo, a un hombre muy especial, que ha hecho tanto por el automovilismo, que ha hecho tanto por la Fórmula 1. Era un apasionado del automovilismo, un gran aficionado. Era un fan del automovilismo, por encima de todo», dijo Horner.

«Dio a tantos pilotos presentes esta noche una oportunidad en tantas categorías. Dio a miles de ingenieros, técnicos y mecánicos [la misma oportunidad] y creo que posiblemente ha hecho más por el automovilismo que cualquier otra persona en la historia. Así que esta noche me gustaría dedicársela a Dietrich Mateschitz.

«Por suerte, vio a Max ganar el campeonato en Japón… y al fin de semana siguiente, el día después de su fallecimiento, conseguimos ganar este trofeo, así que es muy especial», dijo.

Momentos polémicos.

Ben Sulayem, al hacer entrega del trofeo a Christian Horner, no dudó en responderle sobre ciertas polémicas que se han generado a lo largo de la temporada, tratando de defender a la FIA.

Lejos de lograrlo, generó un ambiente tenso en el auditorio así como el rechazo de los aficionados, que critican de nuevo el afán de protagonismo de la Federación, como ha sucedido a lo largo de la temporada con algunas decisiones controvertidas que han generado revuelo en el paddock.