El deporte, en todas sus formas y versiones, siempre trae consigo un manojo de emociones y la Fórmula 1 no es la excepción, como lo veremos en este artículo.
La adrenalina combinada con las fuertes y complejas emociones con las que los pilotos lidian en un fin de semana de competencia han resultado en carreras bastantes emotivas a lo largo de la historia del deporte.
Decepción, júbilo, duelo, orgullo… estas son solo algunas de las emociones que han inundado los podios de la F1. Aquí te dejamos los 10 podios más emocionales.
10 – Daniel Ricciardo, Gran Premio de Mónaco 2016
Lo que debió haber sido una victoria más a nombre del australiano, terminó como un día para el olvido.
Después de haber conseguido la primera pole position de su carrera, Daniel Ricciardo estaba liderando el Gran Premio e iba en camino a materializar esa pole para firmar uno de los mejores fines de semana de su carrera.
Todo iba bien hasta que el equipo lo llamó a los pits para un cambio de neumáticos. Una vez dentro, se dio cuenta de que el equipo no tenía listos los neumáticos, por lo que una parada de 3 segundos, se convirtió en una de 20.
A consecuencia de esto, Daniel Ricciardo perdió el liderato con Lewis Hamilton y no logró recuperarlo por el resto de la carrera, por lo que terminó segundo en el podio. El australiano no pudo ocultar su decepción al no haber podido llevarse un triunfo que ya parecía estar en sus manos.
9 – Sergio Pérez, Gran Premio de Sakhir 2020
En una carrera que parecía terminada para el mexicano desde la primera vuelta, cuando se vio envuelto en un choque con Charles Leclerc, Sergio Pérez fue de ‘zero to hero’.
‘Checo’ cayó a la última posición para así comenzar toda una odisea hacia la victoria. Para la vuelta número 13, ya estaba en P11; para la vuelta 23, estaba en las posiciones de puntos; para la vuelta 34, estaba quinto; para la vuelta 58 alcanzó el tercer puesto y para la vuelta 65 tomó el liderato de la carrera y lo mantuvo hasta el final.
La complejidad de la carrera, el estrés que le provocó caer hasta el último puesto, sumado también al estrés que sentía porque no tenía un asiento asegurado para 2021 y muchos factores más ocasionaron que una vez en el podio, el mexicano no pudiera contener las lágrimas.
8 – Michael Schumacher, Gran Premio de San Marino 2003
Uno de los momentos en la historia del deporte que nos ha demostrado la gran fuerza mental con la que los pilotos de Fórmula 1 cuentan.
Michael y Ralf Schumacher, llegaron a Imola preocupados por la salud de su madre, quién se encontraba bastante enferma.
Una vez terminada la sesión de clasificación, los hermanos volaron a Colonia, Alemania para estar con ella. Al día siguiente regresaron a Imola para disputar la carrera, pero unas horas antes del comienzo les avisaron que su madre había fallecido.
Con un profundo dolor por la pérdida, los Schumacher salieron a correr y a cumplir su compromiso con el equipo y el deporte.
Michael salió victorioso en el Gran Premio y subió al escalón más alto del podio (en el que no hubo ningún tipo de celebración), mientras que Ralf terminó cuarto. Fue así como los hermanos cerraron uno de los peores fines de semana de su vida.
7 – Alain Prost y Ayrton Senna, Gran Premio de Adelaida 1993
Alain Prost y Ayrton Senna demostraron ser dos de los mejores pilotos en la historia de la Fórmula 1, y su rivalidad fue una de las que más marcó al deporte.
Si bien tuvieron sus roces mientras fueron compañeros en McLaren, los dos pilotos siempre dejaron claro que sentían un gran respeto entre ellos.
La mayor prueba de esta declaración fue el Gran Premio de Adelaida de 1993. Alain Prost corría por última vez en la Fórmula 1 antes de retirarse y cerró su magnífica carrera con un segundo lugar en la última ronda del campeonato. Por su parte, Ayrton Senna salió victorioso en esa carrera, compartiendo así otro podio con su ex compañero y mayor rival.
Una vez en el podio, el brasileño tomó el brazo del francés para invitarlo a subir al escalón más alto del podio por una última vez, demostrando así el respeto que sentía por Prost y su carrera deportiva.
6 – Charles Leclerc, Gran Premio de Bélgica 2019
Habiendo conseguido su tercera pole position de su carrera en el Gran Premio de Bélgica, Charles Leclerc estaba preparado para salir a materializarla al día siguiente y ganar así su primera carrera.
Pero la alegría de la pole position duró poco. Horas después de la sesión de clasificación, el mundo del motorsport se pintó de negro debido a la muerte de Anthoine Hubert en la carrera de Fórmula 2.
Los dos pilotos habían crecido y competido juntos desde temprana edad, formando así una gran amistad.
Aun con el inmenso dolor de haber perdido a una de sus mayores amistades, Charles Leclerc demostró una gran fuerza mental al correr al día siguiente y firmar su primera victoria de su carrera.
El triunfo se dio en las peores circunstancias, pero el monegasco no dudó ni un momento en dedicar su victoria a Anthoine y honrar así la vida de su amigo.