La Formula 1 es maravillosa por muchas razones. Cuando crees que algo va previsible o suceder de una manera determinada, todo cambia en un instante. Aunque podíamos presuponer que en ansia acumulada podía provocar algún fallo de pilotaje, fallos mecánicos por la falta de personal y pruebas en un largo periodo de tiempo o incluso la alta probabilidad de safety car, el pasado GP de Austria superó con creces las expectativas.

Queda casi en anécdota el gesto de apoyo al movimiento Black Lives Matter capitaneado en la F1 por Lewis Hamilton. No importa qué piloto se arrodilló y cual no. Todos reunidos, todos vistiendo la camiseta que reza por que el racismo termine.

Este offtopic de la competición en si, ha sido la tracción de este año de Hamilton en su primera carrera del año. No suele empezar con buen pie. Parece que le cuesta coger el nivel óptimo de concentración para aplicar su tan temido Hammertime. Bottas, como si fuera un depredador que huele la sangre ha querido jugar con su presa, que en este caso fue su compañero de equipo. Hay varias razones para pensarlo. Desde sus tiempos discretos en los libres hasta el control de la Q1. En la Q2 y Q3 se quitó la careta y empezó a sacar del bolsillo las décimas que se había guardado bien de miradas ajenas.

En carrera Bottas dominó de principio a fin. Sabía que el terreno se despejaba sobremanera con la sanción de tres posiciones de su compañero. El plan era controlar a Verstappen y el desgaste de los neumáticos. Buena salida, buen ritmo. Verstappen fuera. Solo quedaba ralentizar el ritmo de carrera en momentos claves y voilá, el primer triunfo de la temporada. Esperemos ver a un Bottas tan fuerte y motivado durante toda la temporada. Lo mismo está a tiempo de hacer un Rosberg este año.

En Red Bull no pueden estar contentos. No hay motivos para ello. Los fallos de fiabilidad del monoplaza de Verstappen se unen a la desafortunada salida de pista de Albon tras el incidente con Hamilton. Ya van dos y Albon se empieza a mosquear. También es cierto que la juventud y el ansia por ganar le pudo al piloto de escudería de casa. Tenía el ritmo, tenía los neumáticos para ganar, pero no tuvo la paciencia de prepararselo cuando disponía de más de 20 vueltas para hacerlo. Todo un mundo. Vencer o morir. Es muy respetable, pero en la Formula 1 es mal negocio. El consuelo es pensar que si todo va con normalidad, los resultados van a llegar.

En Maranello tendrán que ir pensando en la canonización de Leclerc. Con los pésimos resultados en los test y en clasificación, nadie podía esperar que consiguiera un 2º puesto en la carrera. El coche ha pasado de tener el año pasado una de las mayores puntas de velocidad, a estar en la cola de las estadística. Ahora es un monoplaza draggy que ni siquiera saca un rendimiento extra en curva.

El rendimiento esperado es el conseguido por Vettel durante la jornada del Domingo (tropos aparte), pero las manos y perseverancia del piloto monegasco, llamado a hacer grandes cosas en el futuro cercano, marcaron la diferencia. Se defendió como un jabato de los Racing Point y Mclaren de turno, batalló con los de arriba de la mejor manera posible y aprovechó su oportunidad.

Algo está cambiando en la Formula 1 y con el techo presupuestario y el cambio de normas en 2022 más que va a cambiar. Los colores rosa, naranja y amarillo le han dado colorido a los puestos de arriba. Racing Point es el mejor posicionado. Es mucho más que un Mercedes pintado de rosa como dicen las malas lenguas. Hay mucho trabajo detrás y un esfuerzo económico de gran calado, que completará su transformación en Aston Martin. Checo tiene coche este año para hacer cosas importantes. Aspiran a ser la cuarta escudería de la parrilla. Tercera si Ferrari no espabila.

Brotes verdes para McLaren. Vuelven a dar importantes pasos adelante. Si ya Sainz nos diera la alegría de su podio en Brasil, ahora ha sido el turno de Norris. Rapidísimo durante todo el fin de semana pero con una madurez impropia para su edad. Puede que sea una de las mejores duplas de la parrilla. Compañeros que compiten y se respetan. No dudan en valorar y felicitar a su compañero cuando toca y arrimar el hombro juntos. Este año toca disfrutar.

Renault va por el buen camino. Sigue mejorando, aunque se espera que esa evolución pise el acelerador en el futuro. Anunciado Fernando Alonso como compañero de Ocon a partir de 2021. El objetivo es volver a la senda de la victoria. La presencia de Alonso hace que el espiritu ganador se respire de nuevo en la escudería francesa.

Repetimos GP en el mismo escenario de la semana pasada. Mismo trazado y mismos neumáticos. Recordemos los datos técnicos del circuito y esperemos que el llamado en esta ocasión GP Estiria sea al menos tan divertido como el anterior.

Ficha técnica:

El Red Bull Ring fue inaugurado oficialmente en 1997.

El circuito se corre en sentido de las manecillas del reloj.

Longitud: 4.318 kilómetros en total.

Recorrido: 71 giros recorriendo 306.452 kilómetros al concluir toda la carrera.

Trazado: 10 curvas en total, 7 derechas y 3 izquierdas.

Características del trazado:

El estrés al que son sometidos los neumáticos es de nivel 2 (bajo) en la escala del 1 al 5 establecida por Pirelli.

El estrés lateral es de nivel 3, es decir medio alto.

La adherencia es de nivel bajo, número 2.

El nivel de abrasión es igualmente bajo de nivel 1.

Nivel de la carga aerodinámica: 3 dentro de la misma escala del 1 al 5.

Neumáticos:

Blancos – C2

Amarillos – C3

Rojos – C4