Alex Palou ha vuelto a llevarse una victoria en el campeonato de IndyCar, en una carrera caótica por las calles del centro de Detroit

Palou continúa con su gran estado de forma, después de un mes de Mayo donde se llevó el GP de Indianapolis, después la pole en las 500 Millas de Indianapolis que culminaron en un cuarto puesto tras remontar desde atrás por un incidente en el pitlane, ahora suma otra victoria más, su sexta en IndyCar, y de nuevo con mano de hierro, desde la pole position, en la primera carrera de IndyCar en el centro de Detroit desde el año 1991, el español firmó una perfecta actuación en una carrera con siete interrupciones por banderas amarillas, y en la que el podio fue completado por Will Power, y Felix Rosenqvist.

Alex Palou: Imbatible de nuevo

A pesar de expresar durante el Sábado su descontento con la estrechez y corta longitud de la nueva versión del circuito urbano de Detroit, Palou se llevó la pole casi con tranquilidad, demostrando tener algo más que los demás, en la carrera, el español dominó la gran mayoría de las vueltas, llegando a sacar casi un segundo por vuelta al segundo en las 10 primeras vueltas bajo bandera verde, de nuevo sacando su rodillo, empezó con blandos y sus otras dos paradas fueron para poner neumáticos duros, Alex se tuvo que defender en las múltiples resalidas de su mayor rival del día, Will Power, que comenzó con duros y consiguió pasar de su séptima posición de salida hasta la segunda, por mucho que quería el australiano, le fue imposible pasar a Palou, con susto incluido en una de las resalidas cuando recibió un toque por parte de uno de los compañeros de Palou, Scott Dixon, volviendo a Alex, consiguió mantener a ralla a Power en unas últimas vueltas frenéticas llena de acción en toda la parrilla, y así lograr una gran victoria que le deja como líder absoluto y destacado del campeonato.

Will Power brilla como suele ser habitual en un urbano

Will Power volvió a realizar una magnífica carrera, su especialidad son los circuitos urbanos, más de la mitad de sus 39 victorias en IndyCar han sucedido en este tipo de trazados, el dos veces campeón, salía desde la séptima posición, tras quedarse al borde de pasar a la última ronda de clasificación, al contrario que la mayoría, salió con neumáticos duros, lo que le permitió alargar mucho su primera parada, y mantener un gran ritmo (al contrario que los que iban con blandos que en las vueltas 22-24 empezaron a caer en picado), para pasar de la séptima hasta la segunda plaza al borde de pasar a Palou, y ahí se quedó durante prácticamente toda la carrera pero siendo siempre una gran amenaza para Palou, poniéndole en aprietos en un final de infarto donde el español se fue un poco largo, y cuando Power le iba a hacer la famosa contra trazada, Scott Dixon le tocó de forma involuntaria, evitando cualquier ataque final sobre Palou en las 5 vueltas finales de la carrera.

Los McLaren dueños del caos

Antes de tocar el tema de los dos McLaren que acabaron la carrera, hablaremos de Patricio O’Ward, que estaba bien colocado en las primeras plazas tras salir con neumáticos duros alargando su parada, realizó su parada junto a su compañero Alexander Rossi, pero su neumático trasero izquierdo fue colocado de forma incorrecta en la parada, dejándole clavado saliendo del boxes, pudo volver a la carrera con una vuelta perdida, desdoblándose al poco del líder Palou, pero debido a su desespero, realizó un movimiento demasiado agresivo sobre Santino Ferrucci, dejándole contra el muro y acabando su carrera, para completar una segunda semana para olvidar, después de su accidente en las 500 Millas, lo que le deja muy lejos de un liderato del campeonato que llegó a tener tras la segunda cita en Texas.

Los McLaren de Felix Rosenqvist y Alexander Rossi acabaron la carrera, pero no sin protagonizar grandes momentos entre ellos, siempre estuvieron juntos durante toda la carrera, a veces realizando adelantamientos entre ellos ajustados pero limpios, y cuando quedaban solo 5 vueltas para el final, con Rossi segundo, Power le pasó, y por detrás vino el otro McLaren, Rosenqvist, con una maniobra ya no tan perfectamente limpia, dejando detrás a Rossi rozando el muro para caer hasta la quinta posición, nada sucio y menos teniendo en cuenta que quedaba tan poco para acabar la carrera, había que hacerlo, Felix catalogó las maniobras como agresivas pero justas, y Alexander acabó un poquito más mosqueado declarando que dentro del equipo aclararían lo sucedido en la pista, sea como fuera, los Arrow McLaren nos dieron grandes momentos durante el día de hoy.

Siete neutralizaciones tuvo la carrera

Después de tener hasta 11 banderas rojas en las dos sesiones de entrenamientos, se hacía prever un Nashville 2 (o como muchos lo llaman, Crashville), sin embargo durante la clasificación no hubo ninguna bandera roja, y en la carrera después de dos amarillas en la salida, una por una salida abortada, y otra por un accidente donde Callum Ilott se comió a Kyle Kirkwood, destrozándole el alerón trasero (a pesar de ello Kirkwood hizo una asombrosa remontada hasta la sexta posición), no hubo ninguna amarilla más hasta la vuelta 44, cuando O’Ward acabó en el muro en el ya mencionado accidente, y como suele pasar, las amarillas traen más amarillas, y pocas vueltas después Sting Ray Robb atrapado en una escapatoria produjo otra, y dentro de la neutralización Graham Rahal se chocó solo, teniendo que abandonar la carrera durante el periodo de Pace Car, encima Benjamin Pedersen se chocó contra él segundos después, con 20 vueltas para el final, Romain Grosjean que estaba en el Top 10 volvió a cometer un error chocándose y teniendo que abandonar, otro piloto que si no fuera por múltiples errores, estaría de lleno en la lucha por el campeonato, por ello acabó extremadamente cabreado con sí mismo y desolado, viendo que tras un duro 2022, tiene coche este año, pero las cosas no paran de salir mal, sea de una forma o de otra.

Palou tiene la mayor diferencia de puntos sobre el segundo en IndyCar desde el año 2020

Alex Palou está probablemente en el mejor momento de su carrera deportiva, acompañado de un maravilloso equipo número 10 del Chip Ganassi Racing, parece surrealista que igual lo cambia por Arrow McLaren el año que viene, Chip Ganassi sigue diciendo que estaría encantado de continuar con él, y no es para menos, pero ese es otro tema, Palou lidera el campeonato sobre uno de sus compañeros, Marcus Ericsson (que realizó su séptimo Top 10 consecutivo del año) con nada más y nada menos que 51 puntos de diferencia, más de una carrera que son 50 puntos (sin contar los bonus de pole, vueltas lideradas y demás), desde que Scott Dixon lograra tres victorias consecutivas en el año 2020, nadie en IndyCar había liderado con tal margen el campeonato desde entonces, el español no puede pasar por mejor momento en su carrera deportiva, y encima ahora viene uno de sus circuitos favoritos del año, Road America, donde sorprendió en 2020 a todos en un circuito tan complicado, realizando un podio en su año de debut con su modesto Dale Coyne Racing, y donde ganó en el año 2021, esa carrera será dentro de dos semanas, donde de nuevo la IndyCar nos dará un gran espectáculo, que este año llevan pleno y no parece que pronto vaya a parar.

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