El papel de la mujer en el mundo del motor ha sido prácticamente nulo hasta los últimos tiempos, en los que se están abriendo paso en todas las áreas del automovilismo. Una de las referencias en la Fórmula 1 es Elizabeth Apthorp, que trabaja como ingeniera de diseño de composites en Renault F1 Team.
En una breve entrevista que compartía el equipo en redes sociales, Elizabeth ha explicado con todo detalle cómo es el día a día de un ingeniero en un equipo de F1.
En primer lugar, indica que su responsabilidad es diseñar partes que luego se instalan en el coche de competición. “Me centro especialmente en los componentes de fibra de carbono, como los espejos retrovisores o los asientos de los pilotos.”
Esta labor le lleva a trabajar sobre todo con el departamento de chasis. No obstante, día tras día hablo con diferentes grupos dentro del equipo, como producción, análisis de estrés, aerodinámica…
El día a día en la fábrica.
Elizabeth apunta que cada mañana se realiza una breve reunión para repasar lo que se hizo el día anterior y lo que se hará durante la nueva jornada. Después de eso, “aprovecho el tiempo en mi mesa, haciendo modelos 3D, pero tenemos que estar seguros de que estamos colaborando con el resto de equipos.”
Según el proyecto en el que se trabaja, el tiempo que dedica a esta tarea varía. Para algunos conceptos se necesitan varios días, mientras que para otros son necesarios algunos meses.
Explica que le encanta el hecho de que cada día sea un reto en el equipo. “Adoro la competitividad y es fantástico trabajar en una compañía donde todos tienen el mismo objetivo final.”
“Hay un estigma asociado a la ingeniería, la gente cree que no hablamos con nadie. Sin embargo es un aspecto muy importante en mi función.”
Los viajes son un punto crítico en este tipo de trabajo. Sin embargo, Elizabeth no viaja en exceso, pues su labor como diseñadora no requiere ir a las carreras. No obstante, la experiencia de estar con el equipo en el circuito es increíble porque, aunque “a menudo puedes aprender de detalles muy pequeños en la fábrica, es en la pista donde te das cuenta de que están sucediendo muchas cosas.”
El camino hacia la F1.
Hoy en día son muchos los que quieren seguir los pasos de esos ingenieros que llegan al Gran Circo. Para ello, Elizabeth estudió Ingeniería General en la universidad, tocando aspectos de la mecánica, electrónica y civil.
Posteriormente se especializó en materiales y diseño, superando un master en Ingeniería del Motorsport Avanzada. Pese a todo, confiesa que “en ese punto aún no tenía claro en qué quería trabajar. Yo disfrutaba viendo F1 y, un día, un amigo me preguntó por qué no intentaba trabajar en la industria. Ese fue el impulso que me llevó a preguntar por trabajo.”
Para aquellos cuyo objetivo es llegar a trabajar en esta industria, Elizabeth manda un consejo. “¡Hazlo! Es lo mejor que hice. No se puede ocultar que es un trabajo duro, pero si quieres esforzarte puedes hacerlo realidad.