En una nueva edición de Charlas en 40tena traemos a Tatiana Calderón, piloto en la SuperFormula japonesa, en las 24h de Le Mans y de desarrollo de Alfa Romeo en la F1.

En plena cuarentena, FormulaRapida.net sigue brindando más charlas en 40tena. Esta vez con Tatiana Calderón, la piloto colombiana que cumplirá su cuarto año como piloto de desarrollo de Alfa Romeo en Fórmula 1, y tras una temporada en la Fórmula 2, en 2020 correrá en la SuperFormula japonesa con el equipo Drago Corse y las 24 horas de Le Mans con Richard Mille Racing Team en la categoría de LMP2.

En esta charla, Calderón habla de sus rutinas de entrenamiento en casa, analiza su temporada pasada en la Fórmula 2, su futuro más próximo para este 2020 así como sus expectativas, y por último repasa de nuevo la importancia de estar en un equipo de Fórmula 1 como Alfa Romeo.

Pregunta: En primer lugar, Tatiana. ¿Cómo estás pasando esta cuarentena? ¿Qué pasatiempos sueles realizar para distraerte en casa?

Calderón: «Bueno, creo que a todos nos ha tocado reinventarnos un poco y aprovechar al máximo este tiempo. Lógicamente tengo una vida muy activa viajando mucho, y ahora he tenido tiempo de quedarme en casa sacando lo positivo: entreno todos los días, estoy empezando un curso on-line de japonés (ya que voy a estar corriendo Japón esta temporada). La cocina no se me da muy bien, así que he intentado aprender más y hacer cosas diferentes, y obviamente hablar y tratar con personas con las que quizá no tenías tanto tiempo de compartir en tu vida normal fuera de casa».

P: ¿Qué rutinas de entrenamiento estás siguiendo para mantenerte en forma? Tanto a nivel físico como de simulador.

C: «En cuanto al simulador aún no lo tengo en casa, debería llegar esta próxima semana de la mano de uno de mis patrocinadores: Rokit. Pero mientras este no llega, sí que he estado entrenando varias veces a la semana el físico, haciendo cardio, bicicleta, subiendo y bajando escaleras, saltando a la comba… A parte también llevo a cabo ejercicios de coordinación, con distintas herramientas y entreno también la parte del cuello que me ayudará en la SuperFormula».

P: ¿Consultas con Alfa Romeo o con Drago Corse la rutina que debes seguir o trabajas por tu cuenta con un entrenador personal?

C: «Yo tengo mi entrenador personal, y es él quien me envía los programas a seguir en casa. Obviamente, estoy en contacto con varias personas de los equipos y veo un poco cómo van ellos, qué están haciendo, cómo siguen las cosas… Porque nadie realmente sabe cuándo volverá todo a la normalidad».

P: ¿Cómo resumirías la temporada pasada? ¿Qué factores de la competición o del monoplaza de la F2 crees que influyeron más para que no pudieras adaptarte a la categoría como lo hiciste en la GP3?

C: «La verdad es que desde la primera vez que me subí al monoplaza de Arden… No me sentí muy a gusto con el coche. Además, mi ingeniero de pista renunció a su cargo dos días antes del primer test con el equipo y me tuvieron que poner un reemplazo rápido. Por otro lado, la comunicación con el nuevo ingeniero no fue la mejor. En un campeonato tan difícil, teniendo tan pocas ocasiones de probar y mejorar cosas. Más que adaptar el coche a ti, tienes que adaptarte tú a él, y eso lo entendí muy tarde. Traté de hacer muchos cambios que quizá no debía para sentirme mejor, y no lo conseguí. Y en una categoría tan competitiva con tantos pilotos experimentados y de gran talento… Es muy complicado».

P: A pesar de todo, ¿qué aspectos positivos destacas del año pasado?

C: «Bueno, el hecho de ser parte de la Fórmula 2 ya es increíble, tener la oportunidad de correr en Bakú, Mónaco… Justo antes de la Fórmula 1 es muy especial, porque siempre he soñado estar en esos escenarios y creo que de todas formas he aprendido muchísimo a falta de una adaptación rápida sobre todo en clasificación y el adaptarse a distintos neumáticos. Creo que las gestiones que he aprendido este año me ayudarán en toda mi carrera y también este año tanto en la SuperFormula como en Le Mans con el LMP2».

P: Ya has podido probar el SuperFormula en los test de hace unas semanas. ¿Qué sensaciones tuviste con él y que diferencias plantearías entre este coche y el de la F2?

C: «Tuve la oportunidad de tener esos días de test antes de que todo se parara, y eran un montón de cosas nuevas… Era mi primera vez en Japón, la primera vez con el nuevo coche, con los neumáticos Yokohama, y la primera vez en el circuito de Fuji. El equipo también es nuevo, así que tampoco tuvimos muchos datos con los que comparar los resultados, pero pudimos ver que tipo de conducción necesitan estos neumáticos, conocer a los miembros del equipo, al coche… Todo fue muy positivo.

El coche es algo distinto porque tiene más carga aerodinámica que un Fórmula 2 y la verdad es que es algo más rápido. Las fuerza G y el downforce… Me atrevería a decir que es lo más parecido que hay a un Fórmula 1, y luego en cuanto a los neumáticos también cambia, ya que los Yokohama necesitan una conducción más fina que los Pirelli»

P: La SuperFormula siempre se ha mostrado un campeonato muy competitivo, y de difícil adaptación. Hemos visto a muchos pilotos de la F2/GP2/GP3 que han probado allí y han tenido muchos problemas. ¿Qué te motivó a querer aceptar un reto de tan alto nivel como este?

C: «He tenido la suerte de encontrar a un patrocinador que ha hecho todo esto posible, Bandero. Gracias a ellos he tenido la oportunidad de seguir en monoplazas. Porque yo tenía claro que quería seguir en monoplazas la mayor parte de tiempo que su pudiera y ellos tenían interés en estar en Japón. Entonces todo de alineó de manera correcta. También es un campeonato que he seguido de cerca, porque como bien decías ves a Artem Markelov, a Dan Ticktum, Pierre Galsy, Stoffel Vandoorne…

El nivel es muy alto, tanto o más que en la Fórmula 2. Hay mucha gente con experiencia, ex-pilotos de Fórmula 1, ganadores de las 24h de Le Mans, pilotos de Red Bull… Y es una forma de trabajar distinta, será un año de muchos desafíos, no será fácil. Será más difícil que la Fórmula 2, pero era una oportunidad que tenía que tomar, y creo que voy a aprender muchísimo».

P: Si todo vuelve a la normalidad, tu programa para este 2020 también se centra en la resistencia y estarás en Le Mans, en un LMP2 junto a Katherine Legge y Sophia Flörsch. ¿Cómo te sientes de cara a afrontar una de las carreras más prestigiosas del mundo y pilotar un coche tan distinto?

C: «Es una lástima que estemos viviendo este momento porque iba a ser, o espero que sea, un año increíble en la parte deportiva. Poder hacer las 24 horas de Le Mans con un equipo como el Richard Mille Racing Team es una oportunidad de oro. Es uno de mis sueños y es una de esas carreras que tienes que disputar una vez en tu vida, y tener esa oportunidad en septiembre, va a ser muy especial.

Todo el mundo a quien he preguntado me dice que no hay nada igual, ni Indy500, ni Mónaco en la Fórmula 1… Le Mans es único, y  hacerlo en un LMP2 me sorprendió muy positivamante. El hecho de competir en una categoría que te hace estar pendiente de tantas cosas te hace un piloto súper completo y poder compartirlo con Katherine y Söphia en un equipo tan bueno… Creo que será una experiencia muy especial».

P: Por último, seguirás un año más en Alfa Romeo como piloto de desarrollo. ¿Cuán importante es para ti aprender de pilotos tan experimentados como Kimi Räikkönen o Robert Kubica?

C: «Aprender de una leyenda como Kimi y ahora junto con Robert, que estaban corriendo en la televisión de mi casa cuando yo tenía unos 9 años, que corrían contra Juan Pablo Montoya que ha sido mi ídolo de siempre… La verdad es que te sorprende estar a su lado. Me gusta ver cómo hablan con los ingenieros, ver qué feedback dan del funcionamiento del coche, su entendimiento de la parte técnica… Es cierto que Kimi es un hombre de pocas palabras, pero con los ingenieros habla más, y es muy bueno ver cómo se expresa con ellos con respecto a las cuestiones del coche.

«Por otro lado, veo la otra cara con la generación más joven con Antonio Giovinazzi. Le conozco bien porque fue compañero mío en la Fórmula 3 durante varios años. Ver como él y Robert aportan al equipo es muy positivo y beneficioso para mí. Es un honor para mí formar parte de Alfa Romeo y verlos crecer, porque desde que empecé con ellos hasta hoy han dado saltos muy grandes y es bonito ver esa evolución».