La entrada de Alfa Romeo como apoyo de fábrica y la apuesta de Ferrari de darles el motor más evolucionado han dado a Sauber un progreso constante que les ha hecho avanzar mucho durante esta primera mitad de la temporada.

Sauber empezó su temporada siendo el peor coche de la parrilla, pero pronto superaron a Williams (en caída libre) y empezaron a acercarse a la clase media. Gracias al motor Ferrari y al trabajo aerodinámico realizado con apoyo de Alfa Romeo, han conseguido acercarse más y más a Toro Rosso y Mclaren, hasta el punto de formar un terceto con ellos. Ha llegado un punto en el que son capaces de retar a los Force India y Renault a una vuelta en circuitos favorables y han conseguido un ritmo de carrera homologable a esa clase media.

Aunque el coche ha progresado de forma notable, lo que ha permitido que ambos pilotos puntúen en más de una ocasión, ha habido un importante «factor humano» en la posición actual de Sauber. La aparición espectacular de Charles Leclerc en su primera temporada en la Fórmula 1 ha sido de gran ayuda para que Sauber sumara puntos en lugar de quedarse a las puertas. Esta actuación ha generado rumores que situaban a Leclerc en el asiento de Kimi Räikkönen en Ferrari, pero finalmente parece que lo más probable es que el monegasco siga en Sauber una temporada más, lo que es una excelente noticia para una escudería en crecimiento.

En la segunda mitad del campeonato vendrán circuitos favorables al motor Ferrari del Sauber y habrá que ver si la progresión se mantiene y eso les permite adelantar posiciones. El principal objetivo a corto plazo de Sauber es superar a Toro Rosso, que les saca 10 puntos en el campeonato de constructores, para buscar más tarde acercarse a unos Mclaren que si bien han perdido fuelle, conservan un gran colchón de puntos y tienen en Fernando Alonso a un piloto capaz de aumentar el contador aún con la bajada de rendimiento del monoplaza.