Hace unas horas se ha confirmado que Bakú continuará en el calendario oficial de Fórmula 1 hasta mínimo 2023. Un gran noticia que nos hace presagiar que la tierra del fuego llegó en 2016 para quedarse bastante tiempo. A continuación os dejamos los dos motivos principales por los que creo que es un acierto que siga en el calendario.

El trazado es muy complejo

No es un secreto que es uno de los circuitos más complicados del calendario oficial. Sus largas rectas combinadas con la zona del casco antiguo de la ciudad, lenta y revirada, da muchos quebraderos de cabeza a los ingenieros sobre que configuración es la más óptima.

Teniendo en cuenta esto, los equipos descartan la posibilidad de poner una configuración tipo Mónaco, con mucha carga aerodinámica y con una relación de marchas más corta. El motivo es simple: Las largas rectas, poco habituales en trazados urbanos. Con una configuración así los equipos sufrirían demasiado en la recta más larga del mundial.

Solo hay dos opciones posibles, tener un a configuración media, que haría ganar algo décimas en la parte revirada o una configuración con poca ala que permitiría ganar décimas en la recta. Lo cierto es que los equipos con mejor motor optan por mayor carga mientras que los equipos con un motor más lento prefieren penalizar en la parte lenta.

En todo caso, vemos diferencias en las configuraciones de los monoplazas que no podemos apreciar en otros circuitos del campeonato.

Las carreras son caóticas

Quitando la carrera de Fórmula 1 en 2016, el resto siempre ha tenido sorpresas, tanto en Fórmula 1, como las categorías de apoyo. Sin ir más lejos, en 2017 vimos el más que inesperado podio de Stroll, con Bottas adelantando al canadiense en la misma recta de meta para ser segundo y Ricciardo ganando con el teórico motor más lento, con permiso de Honda.

Pero esa misma carrera también vimos al coche de seguridad, Vettel impactando a su Ferrari contra Hamilton cuando estaban tras el SC, Hamilton perdiendo su reposacabezas y obligado a entrar y un largo etc.

Pero es que si miramos este mismo año tenemos otro caos sobre la tierra del fuego. Red Bull queándose sin los dos coches en una arriesgada maniobra de adelantamiento, coches que en la misma recta perdían 2 posiciones cogían rebufo y ganaban 3, Alonso a 2 ruedas en la primera vuelta y puntuando con una gran falta de velocidad punta, Leclerc puntuándo, Pérez en el podio con un Force India muy cuestionado, y esto solo es un breve resumen.

En conclusión, en Bakú pasa de todo y da un poco de sal a un campeoanto que en muchos momentos tiene un sabor soso. Creedme, es una cita que no hay que perderse y si la Fórmula 1 ya es emocionante, os recomiendo que también veáis Fórmula 2 y Fórmula 3 en este trazado que podríais ver cosas que no se repitan durante la temporada.