Sin duda Miron ha sido una de las sorpresas del fin de semana, completando un sólido debut en F4 con tan solo 15 años.

El Racing Weekend de Cheste ha sido muy interesante, tanto por el regreso del público como por la competitividad y la variedad en las categorías que han formado parte. En la F4 española hemos vivido duelos interesantes, choques, adelantamientos imposibles… y debuts.

Se trata, entre otros, de Miron Pingasov, un jovencísimo piloto ruso afincado en Barcelona (tiene licencia catalana en algunos eventos) que ha sorprendido por su velocidad y constancia durante el evento.

Miron, cuya marca ya carismática es un “pingüino”, ha corrido de la mano del equipo holandés, MP Motorsport, el cual constituye una gran familia dentro del certamen ya que acumula la friolera de 9-10 vehículos por carrera, algo que la convierte una flota de monoplazas, con el extra de la variedad cromática que ofrecen entre sí.

Este joven piloto ha debutado de manera oficial en monoplazas tras un periplo interesante en el karting, corriendo gran parte de su carrera en el equipo DPK, relacionado estrechamente con Fernando Alonso y que, acabó a un gran nivel tras recuperarse de una lesión por accidente en pista.

Como acompañante de lujo tiene a un coach bastante reputado, Richard Verschoor, actual piloto de MP en F2 y ganador de la F4 española en 2016.

El atrevimiento y garra del ruso ha llamado la atención del paddock¸ sobre todo con su gran actuación en la carrera 3 (la definitiva del fin de semana), en la cual Pingasov¸ estuvo activamente cerca del ‘Top 5’, algo reservado normalmente a los pilotos más experimentados, o que al menos, tienen acumulados más kilómetros en F4.

Con esta actuación y sobre todo, con la ilusión que atesora el joven piloto por las dos rondas que restan esta temporada (Jerez y Barcelona), espera seguir aprendiendo para postularse, en 2022, como uno de los favoritos a vencer el título de esta F4 Española la cual, sigue demostrando, que la valía y talento de sus pilotos se consagran con un valor al alza.