La FIA sigue trabajando para mejorar y avanzar en materia de seguridad, no solo en categorías internacionales sino también en la base del motorsport. En relación al karting se ha decidido implementar algunas medidas adicionales a las ya existentes.

Las cámaras en los cascos, tan de moda en F1 y Fórmula E están prohibidas, ya estén dentro del propio casco o fuera de él a modo de Go-Pro. Así lo recuerda la Federación, citando el Artículo 1.4 del Capítulo III del reglamento técnico de Karting: “Los accesorios deben instalarse de acuerdo con las instrucciones del fabricante del casco. Solo se utilizarán accesorios aprobados por la FIA. Cualquier otra modificación o adición de accesorios no homologados (cámaras de casco, visores, etc.) dejará sin efecto la homologación de casco FIA.”

Instalación de cámara de casco no aprobada. Copyright: FIA

El anclaje de los cascos también debe permanecer en su lugar. En relación al casco M6 no será necesario el uso de estos anclajes si se trata de una categoría en la que el piloto no lleva un dispositivo de sujeción frontal de la cabeza. En el caso del diseño Helmet M6 de 2010 se recomienda encarecidamente retirar el anclaje, pues puede inducir fuerzas tangenciales en el cuello del conductor durante un accidente en caso de contacto del anclaje con el suelo.

Sin embargo, la FIA recuerda que para la versión de 2002 está prohibido quitar los anclajes.

Por último, en relación a la visera del casco, se indica que se ha observado un número considerable de viseras falsas en cascos aprobados por la FIA, lo cual está prohibido y es peligroso ya que se reduce el nivel de seguridad respecto al original.

Usando viseras no homologadas se pone en riesgo al piloto, pues si no se ha superado la prueba de penetración, no se garantiza la seguridad ante el impacto de un objeto en movimiento. Además, puede dificultar al piloto detectar las luces de señalización y su color así como ser peligrosa por no haber superado la prueba de inflamabilidad.

En definitiva, la FIA reitera que deben cumplirse todos los estándares de seguridad, desde las competiciones de menor nivel para garantizar la seguridad de todos los pilotos en un deporte que no deja de ser de riesgo.