El actual piloto de Racing Point Force India, Esteban Ocon, nunca ha escuchado malas palabras de sus jefes de equipo, de sus rivales, de sus compañeros, del paddock y todo han sido halagos si se referían a su conducción.

Desde su llegada a la Fórmula Uno, en 2014, disputando unos test con Renault y un año después fichado por Force India como piloto de pruebas, ha demostrado que tiene talento. Sus números con el equipo Manor en 2016 son demasiado decentes si tenemos en cuenta que no era de los coches más competitivos. Consiguió un decimosegundo puesto en Brasil.

Fichó por Force India como piloto titular en 2017, con Sergio Pérez de compañero, y ha conseguido dos quintos puestos como mejor resultado en estas dos temporadas. Todo esto siendo piloto de Mercedes, las ventajas que eso conlleva.

Pero eso ni eso puede valer para que tenga un asiento en 2019, ya que puede quedarse fuera tras el fichaje de Daniel Ricciardo por Renault, la alineación de McLaren con Carlos Sainz y Lando Norris y algún que otro movimiento.

Recién aterrizado en Singapur, el francés decía lo siguiente: “No estoy frustrado, estoy realmente decepcionado. Esa es la palabra. No estoy enfadado con nadie ni nada. Pero he trabajado muy duro para llegar hasta aquí, he estado trabajando muy duro para lograrlo en estos dos últimos años”.

“Este año he progresado en comparación con el pasado y estoy 11-3 en la clasificación contra Sergio. Estoy luchando duro para hacer lo mejor que puedo en cada carrera y llegar aquí, sin saber qué haré después de este año, es difícil de tragar, obviamente”, continuaba.

Sobre estar en Fórmula 1 en 2019, lo ve crudo: “Todavía hay esperanzas, pero cada vez son menos, como sabéis. Por eso estoy decepcionado en este momento: ver que no son solo los resultados los que entran en juego. Tiene que haber otras cosas, y eso es lo que me decepciona: estar en esa situación, porque es difícil creer que estaba en una posición excelente hace dos meses y las cosas han venido de esa manera ahora”, quizás ser refiere a las inyecciones económicas como la de Pérez o el tener a Lawrence Stroll como dueño del equipo.

Quizás Williams sea una gran opción, pero cada día que pasa también es más difícil: “Todavía hay conversaciones, probablemente con ellos o donde sea que pueda ir, pero también son cada vez menos”.

A Ocon no le importa tener contrato con Mercedes, solo espera que los equipos miren más sus resultados: “Nunca he hablado con él sobre esto. Lo que sé es que tengo un contrato con Mercedes, y nunca he hablado de esto. Pero lo que se debe tener en cuenta son los resultados, y el trabajo que realiza el piloto y el esfuerzo que hace para lograrlo. Esos elementos deportivos adicionales no deben tenerse en cuenta”.