El Hungaroring vuelve a albergar el GP de Hungría, la última parada de la Fórmula 1 antes de afrontar el parón veraniego de agosto.
Ecos de Francia, Hungría y el parón veraniego
Al llegar a Francia, comentábamos en Fórmula Rápida que Francia nos podía sorprender con una buena carrera, y desde luego que tuvimos un domingo entretenido: el costoso error de Charles Leclerc que forzó su abandono, la remontada de Carlos Sainz a pesar de Ferrari y la lucha por la tercera plaza entre George Russell, Sergio Pérez y el propio Sainz fueron las tres principales líneas de acción del domingo en Paul Ricard, con más acción de la que se esperaba.
Max Verstappen salió más líder que nunca del circuito de Le Castellet, y su ventaja sobre el segundo clasificado, Leclerc, es ya de 63 puntos con sólo diez carreras para el final de la temporada. Ferrari y Leclerc necesitarán toda la suerte que no han tenido hasta el momento, una consistencia digna de la Ferrari de otra época y dejar de cometer los errores compartidos que les han llevado a no sumar unos valiosos puntos que ahora echan en falta para la lucha por el Mundial.
En Francia se volvió a reafirmar una realidad que se venía señalando desde hace tiempo: Mercedes está ahí, y no van a irse. Los ocho veces Campeones del Mundo sumaron un doble podio, con un Lewis Hamilton en un gran estado de forma, y el grandísimo talento que no deja de crecer en George Russell. Mercedes está a sólo 44 puntos de Ferrari en el Mundial de Constructores, y Russell a sólo uno de Sainz en el de Pilotos por la tercera plaza.
El Gran Premio de Hungría y el Hungaroring: tantas historias…
Han sido 36 las veces que la Fórmula 1 ha celebrado un Gran Premio en Hungría, y todas ellas ha sido en el apreciado trazado del Hungaroring. El estreno del circuito en el calendario tuvo lugar en 1986, en una carrera que se llevó Nelson Piquet tras una gran batalla con Ayrton Senna.
Desde entonces, el Hungaroring ha albergado momentos míticos de la historia de la Fórmula 1, como las primeras victorias de pilotos como Damon Hill (1993), Jenson Button (2006) o Heikki Kovalainen (2008). Particularmente, el Hungaroring tiene en la memoria española en F1 un lugar especial: en este trazado logró Fernando Alonso su primera victoria en 2003, Pedro Martínez de la Rosa su primer y único podio en 2006, y Jaime Alguersuari debutó con Toro Rosso en 2009.
También en Hungría se han vivido momentos dramáticos, que aún hoy hielan la sangre. El primero de ellos es el desafortunado accidente que sufrió Felipe Massa en 2009, al golpearle una pieza que cayó del Brawn GP de su compatriota Rubens Barrichello, y que obligó al piloto de Ferrari a perderse el resto de la temporada. El segundo, aún más reciente, nos lleva al fin de semana de 2015 en que conocimos la muerte del querido Jules Bianchi, en una carrera que le terminaría dedicando el ganador, Sebastian Vettel: «Gracias Jules, esta victoria es para ti».
Antecedentes recientes del GP de Hungría
A lo largo de las 70 vueltas en Hungría casi siempre pasan cosas más que relevantes, y la edición del año pasado es uno de los mejores ejemplos. Una salida en mojado que nadie preveía hizo que la primera curva fuera un absoluto caos con los errores de Valtteri Bottas y Lance Stroll, que provocaron, de manera directa o indirecta, el abandono de seis pilotos en la primera vuelta y durante la bandera roja que le siguió.
Con el Red Bull de Verstappen malherido después del impacto de la primera curva, Mercedes lo tenía en bandeja para que Lewis Hamilton, en aquel momento por detrás en el Mundial, sumara el máximo de puntos posible. Fue entonces cuando Mercedes cometió un error indigno de su nivel, como fue dejar al heptacampeón solo en pista, con neumáticos intermedios, mientras la totalidad de la parrilla se dirigía a boxes a montar neumáticos de seco.
El error dejó al británico con la tarea de remontar en un circuito en que adelantar es manifiestamente complicado, y aun así, con un gran ritmo y un monoplaza sin rival aquel día, Hamilton ascendió por puro ritmo a la tercera posición, que se convirtió en segunda tras la descalificación de Sebastian Vettel.
La remontada de Hamilton nos dejó uno de los momentos, no del año, sino de la historia de la Fórmula 1: la magistral defensa que realizó Fernando Alonso por la cuarta plaza. El piloto de Mercedes, con neumáticos nuevos y una superioridad de monoplaza evidente, venía con un ritmo endiablado superando coches sin extrema dificultad gracias al DRS desde que se encontrara en la 14ª plaza tras el error de su muro. Pero al llegar a Fernando Alonso, el piloto británico se encontró con una dura y limpia defensa que hizo que tardara ocho vueltas en adelantar al español.
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El valiosísimo tiempo que Alonso hizo perder a Hamilton en esta batalla fue más que fundamental para que su compañero, Esteban Ocon, ganara su primera carrera después de haber sobrevivido al caos de la primera curva, y tras aguantar durante todo el Gran Premio la presión de Sebastian Vettel, en la que sería la primera victoria para la estructura Renault desde Australia 2013. Además de la victoria de Ocon, aquel domingo los aficionados al automovilismo pudimos disfrutar de una de esas grandes batallas en la que dos gigantes de la Fórmula 1 lo dan todo, una batalla entre dos de los más grandes que durante tantos años no habíamos podido disfrutar.
El Mundial de Fórmula 1 al llegar a Hungría
El abandono de Leclerc en Francia deja a Verstappen aún más relajado en la parte dorada de la tabla, y la sangría de puntos para el monegasco ya asciende a 63. No obstante, Mattia Binotto no pierde la fe, afirmando que «no hay razón por la que Ferrari no pueda ganar las diez carreras que faltan». Más allá del comprometido optimismo del team principal de la Scuderia, si Ferrari no consigue echarle el guante a Verstappen puede verse obligada a empezar a mirar por los retrovisores: Pérez sólo está a 7 puntos de Leclerc, y Russell a uno sólo de Sainz, mientras que la fuerte Mercedes se encuentra a tan sólo 44 de la propia Scuderia Ferrari en el Mundial de Constructores.
Mientras tanto, Lando Norris continúa liderando la zona media de la tabla, con un gran trabajo del piloto británico que suma 70 de los 89 puntos de McLaren, con un Daniel Ricciardo cada vez más desdibujado.
En cuanto al Mundial de Constructores, Red Bull parece igual de inalcanzable que Max Verstappen, hasta el punto de que Ferrari está más cerca de perder la posición con Mercedes que de acercarse al equipo de la bebida energética. Por detrás, finalmente Alpine se ha hecho con la cuarta plaza en el Mundial, tras superar a McLaren. Haas llega a Hungría con el paquete de mejoras que estrenará Kevin Magnussen y que, anticipa el equipo estadounidense, hará que el Haas se parezca a un «Ferrari blanco», mientras Aston Martin y Williams continúan su travesía por el desierto, a pesar de que el punto sumado por Lance Stroll en Francia acerca algo más a su equipo a AlphaTauri.
El Gran Premio de Hungría siempre nos deja mucho de lo que hablar durante el inminente parón veraniego, así que desde Fórmula Rápida os invitamos a disfrutar del fin de semana de Fórmula 1, Fórmula 2, Fórmula 3 y W Series en el Hungaroring, y como siempre, a que lo sigáis con nosotros. ¡Nos vemos!
