McLaren está cambiando, si más no eso parece. Desde la marcha de Ron Dennis, la destitución de Boullier, la llegada de Zak Brown, el cambio de Indy a F1 por parte de Gil de Ferran, todo ha cambiado mucho en Woking. El último en aterrizar es Pat Fry. El reconocido ingeniero vuelve a McLaren tras dejarlo en 2010.
El último trabajo de Fry en F1 fue en 2016 como consultor de ingeniería en Manor. Pat Fry con ya 54 años vuelve a la F1 tras dejarlo con la caída del antiguo imperio Marussia y lo hace junto a su antiguo equipo. Parece que desde Woking están haciendo el efecto llamada a aquellos artífices que crearon una gran sintonía y llevaron a McLaren a lo más alto allá en la antigua década.
Pat Fry es un más que reputado ingeniero en el mundo de la F1 y es que trabajó con el equipo de Woking entre 1993 y 2010 cuando se unió a Ferrari de la mano de Fernando Alonso. Cuando el asturiano se marchó, Fry también dejó la escudería. Habiendo trabajado en las mayores escuderías del mundo del automovilismo, Fry comenzó sus andadas en 1987, hace ya más de 30 años en la escudería de Benetton.
Cuando llegó a Ferrari todo eran sueños, pero en 2014 y tras no lograr un solo campeonato, la ‘Scuderia’ quiso hacer reforma y fichó a James Allison que dejó a Fry fuera de la estructura.
Con el cansancio y el estrés acumulado en las espaldas del ingeniero, se tomó un merecido descanso hasta que en 2016 recibió una llamada de Manor y se volvió a involucrar.
Fry se une a Woking como Director de Ingenieros y trabajará en el monoplaza del 2019 mientras el equipo busca dar un paso al frente con sus nuevos y jóvenes pilotos Carlos Sainz y Lando Norris. La experiencia de Fry será inmensa para el equipo que lucha por mejorar y avanzar.
McLaren tiene la esperanza de poder conseguir a James Key de Toro Rosso lo antes posible y es que el ingeniero va más que solicitado.
La limpieza en McLaren empezó hace tiempo, pero parece que cada vez va a más. Ya se fue Eric Boullier, Tim Goss le acompañó y Matt Morris hizo lo mismo. Ahora, Fernando Alonso y Stoffel Vandoorne también se irán a finales de 2018, por lo que el McLaren del próximo año no tendrá nada que ver con el que vimos en su vuelta a la F1.