Ogier se queda solo en Montecarlo

El piloto francés de Volkswagen, Sébastien Ogier, ha finalizado al término del segundo día de Rallye, en primera posición con un margen de más de un minuto con el resto. Y todo, gracias al accidente de Sébastien Loeb, quien ha dominado en las siete primeras especiales.

La de temporada de WRC 2015 ya ha empezado, y de emoción no ha faltado ni un pelo. Dos franceses se han encargado de hacer vibrar al público que se acercado hasta las nevadas montañas de Montecarlo y los Alpes marítimos franceses para ver las ocho primeras especiales de este mítico Rallye. Tras al término de este viernes, Sébastien Ogier domina con comodidad, mucha, pues dispone de más de un minuto sobre su compañero de equipo, Jari-Matti Latvala.

El rallye empezó ayer con las dos primeras especiales, en las que Sébastien Loeb dejó a todo el mundo maravillado. El francés, que vuelve a la competición 15 meses después de su retirada, se puso al frente de la general sacando 22 segundos a Ott Tanak y nada más y nada menos que 30 segundos del vigente campeón, Sébastien Ogier. El de Volkswagen no se asustó y en la segunda especial recortó hasta quedarse a 13 segundos de Loeb, quien había perdido tiempo en ese tramo al tener que adelantar a Kubica y Bouffier.

En esas dos especiales de ayer por la noche también tuvo problemas Dani Sordo, que se quedó clavado frente a un muro de nieve, y junto a una mala elección de los neumáticos perdió hasta un minuto y medio respecto al liderato. Así pues, ayer por la noche Loeb se iba a dormir como líder de la general, seguido de Ogier, Latvala y los dos M-Sport de Tanak y Evans.

Esta mañana Loeb ha empezado fuerte el día, pues con las carreteras heladas el francés le ha sacado 15 segundos en la tercera especial a Ogier, dejando a su compatriota otra vez cerca de los treinta segundos de distancia. Pero a medida que salía el sol, el hielo de las carreteras se ha desecho, dejando la pista con barro y nieve. Algo que ha perjudicado a Loeb, quien ha empezado a perder segundos respecto al vigente campeón.

A partir de la SS4 Robert Kubica ha empezado un recital, marcando el ‘scratch’ en la cuarta, la quinta y la séptima especial del Rallye. Por desgracia, el polaco ha tenido problemas en la última especial del día, chocando contra una zona de árboles, y teniendo un pinchazo posterior que le ha hecho perder tres minutos más, cayendo a la 28ª posición a 14 minutos del liderato.

En esas especiales de mitad de la mañana, Ogier le ha ido recortando segundos a Loeb, sobretodo en la quinta especial, donde le ha quitado de golpe veinte segundos, quedándose a solo tres segundos. En la sexta Loeb a aumentado distancias marcando el ‘Scratch’, pero en la siguiente Ogier -quedando segundo detrás de Kubica- le ha podido quitar 15 segundos más, asaltando la primera posición que consolidaría en la siguiente y última especial del día.

En el último tramo, de 25.40km que iba de Les Costes hasta Julien en Champsaur, han pasado numerosas acciones a destacar. En primer lugar, Kubica perdía tiempo con sus incidentes ya mencionados. Y poco después, Kris Meeke también sufría una salida de pista que le dejaba fuera de combate, llegando a meta muy lento, cayendo al 21º puesto de la general, a 12 minutos del liderato.

Pero esto no acabaría aquí, en la parte final de la etapa, Sébastien Loeb perdía el control del DS3 WRC y chocaba contra una piedra, destrozando completamente la suspensión de la rueda trasera izquierda. Este percance le obligaba a parar y reprender la marcha a un ritmo muy lento que le hacía caer hasta el 15º puesto de la general, quedando a diez minutos del que era su posición hasta entonces. Esta era la decepción de Loeb respecto al incidente:

«He golpeado una piedra en una zona con hielo. No ha sido demasiado fuerte, pero algo se ha roto. Lo he intentado con todas mis fuerzas, porque sabía que con las condiciones que se estaban dando era imposible dada mi posición de salida, así que he arriesgado eligiendo una monta de neumáticos diferente y he cometido un error».

La clave del día de hoy ha sido, sin duda, la elección de los neumáticos, pues las diferentes condiciones del terreno, con nieve, tierra, asfalto y hielo, han dificultado mucho a los pilotos a la hora de escoger el compuesto de nieve con clavos o el de invierno normal. Eso ha perjudicado algunos pilotos, como Evans, que ha perdido mucho respecto a los punteros, además de perder aún más tiempo con un trompo. Por contra, otros pilotos han subido muchas posiciones gracias a una buena operación, como es el caso de Ostberg, que en la última especial ha pasado del octavo al quinto lugar.

Así pues, al final del segundo día encontramos a los tres Volkswagen al frente con un Ogier destacado en primer lugar con un margen de 1 minuto y 45 segundos sobre Latvala y más de dos minutos de Mikkelsen. Ott Tanak está sorprendiendo en su debut como piloto oficial, manteniéndose sin problemas en cuarto lugar seguido por Ostberg, Evans, unos discretos Hyundai con Neuville delante de Sordo, y con Prokop y Solberg cerrando el Top 10.

Mañana la segunda etapa estará compuesta por cuatro especiales -incluyendo una maratón de 50km- que harán correr un total de 128km desde Lardier y Valença hasta Faye, por el sur del de Mónaco.

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