Lorenzo sigue pensando que el motor de 2018 es mejor, pero tiene bastantes dudas respecto al chasis: “Era importante probar la moto antigua. Hoy fue un día complicado y viendo la situación decidimos hacerlo. Todavía hay algunos puntos en los que es mejor que la nueva, pero también otros peores. El problema es que para Qatar será difícil hacer una mezcla, pero si tengo que elegir en este momento y sacar una conclusión, me quedaría con la 2018.”
“En Qatar estaremos mucho mejor que aquí, parecido a Sepang y esperando a conseguir un mix lo antes posible para ser más competitivo. Tenemos que ser pacientes en las primeras carreras e intentar sacar el mejor resultado”, advierte un Lorenzo que se ve venir malos resultados en los primeros compases de la temporada, después de ver la gran diferencia entre lo que ofrece la Ducati en Sepang y en Buriram.
“No podemos sacar conclusiones de este día porque cuando todos los pilotos hicieron el tiempo yo estaba con neumáticos viejos. Cuando monté los nuevos hice un simulacro de carrera y no era tan agresivo como cuando haces una vuelta. Estamos mucho mejor que lo que refleja la 22º plaza, no para top3, pero tampoco entre los tres peores”, concluye el mallorquín tras una semana frustrante sobre la moto.