La resaca del GP de Italia aún dura. Hoy en La Telemetría aparcamos los aspectos técnicos de la Fórmula 1 para repasar, a través de los datos y las estadísticas, la vibrante carrera de Monza y el triunfo de Pierre Gasly.
La última W, ¿por qué ganó Gasly?
En periodismo, para dar una noticia es fundamental aportar datos de las cinco W, que provienen de las palabras inglesas “What, When, Where, Who, Why” (qué, cuándo, dónde, quién y por qué).
En nuestro caso la noticia es bien conocida, pero quizás no seamos capaces de responder a la última W, ¿por qué ganó Pierre Gasly el pasado domingo?
Durante el fin de semana hubo dos sucesos que marcaron el desenlace de la carrera. Todo comenzó en la clasificación del sábado, cuando Gasly tenía rebufo de su compañero Kvyat, que a su vez tenía la ventaja de seguir la estela de Magnussen.
Sin embargo, Pierre pasó a Q3 y Kvyat no. El motivo, la salida de pista en Lesmo 2 del piloto de Haas, que dejó sin rebufo para el resto de la vuelta al ruso de Alpha Tauri. Esta tesitura hizo que Gasly tuviera que comenzar la carrera con blandos mientras que su compañero lo haría con duros, pensando en una estrategia invertida.
De esta forma comenzó la carrera el domingo. Tras la salida, ambos pilotos de la escudería italiana rodaban uno tras otro, con Gasly delante. Detrás, Kvyat comenzó a quejarse del ritmo del francés, pidiendo al equipo que le dejara pasar. Los neumáticos blandos habían desfallecido y los duros estaban en su mejor momento.
Los repetidos mensajes de radio de Kvyat tuvieron su efecto en la vuelta 19, cuando Pierre Gasly entró en boxes para cambiar gomas. Lo hizo cuando el sector tres estaba bajo bandera amarilla, por el monoplaza detenido de Kevin Magnussen, y antes de que saliera a pista el coche de seguridad.
Hacer la parada en ese instante resultó ser fundamental para que Pierre se llevará posteriormente la victoria, pues no tuvo que entrar en boxes cuando sus rivales sí lo hicieron, durante el periodo de coche de seguridad y cuando estaban todos agrupados.
Los datos del GP de Italia.
La victoria de Pierre Gasly, así como el atípico podio que completaron Carlos Sainz y Lance Stroll, dejan unas estadísticas también poco comunes.
Stroll consiguió el segundo podio de su carrera. El primero lo había conseguido en Baku 2017, la última carrera en la que hubo una bandera roja antes de llegar al GP de Italia. También fue el segundo podio de Carlos Sainz, que además consiguió su mejor resultado en F1 hasta la fecha.
Un podio que no contó con ningún piloto de Mercedes, Ferrari o Red Bull, algo que no sucedía desde Hungría 2012. Es más, entre estos tres equipos habían ganado de manera consecutiva todas las carreras desde Australia 2013.
El buen resultado de Mclaren también sirve para romper malas rachas. Con el segundo y cuarto puesto alcanzaron un top4 que no lograban desde 2011.
Quien continuó con su buen estado de forma fue Lewis Hamilton que, aunque no venció esta vez, logró estar 41 veces en puntos de forma consecutiva, igualando el récord histórico y manteniendo un buen margen en el campeonato respecto a sus rivales. No fue tan buen día, sin embargo, para Mercedes, que no tuvo a ninguno de sus pilotos en el podio por primera vez desde el inicio de la era híbrida.
De esta forma, y tras un atípico fin de semana en Monza, la Fórmula 1 se traslada a Mugello para vivir el primer Gran Premio en este circuito italiano.