A pesar de que la competición está parada, la incertidumbre sobre cuando se podrá comenzar la temporada de Fórmula 1 sigue provocando múltiples noticias. Presuntamente, la temporada comenzará a mediados de julio y se extenderá hasta últimos de noviembre, pero ahora, se empieza ya a hablar de la posibilidad de que se redujera más hasta quedar en sólo once carreras. Todo dependerá de la evolución del Coronavirus.
A estas previsiones se añadía la cuestión del nuevo reglamento de la Fórmula 1, con su entrada en vigor prevista para 2021, antes del Coronavirus claro. Una vez que se desató la pandemia y con la oleada de cancelaciones y aplazamientos de carreras, se decidió posponer la entrada del nuevo reglamento hasta 2022.
Las carreras de 2020 serán menos y sería un excesivo gasto hacer, por así decirlo, dos coches para lo que en realidad puede ser un año y medio, o menos, de carreras. Más, con un cambio de reglamento cercano en el tiempo y un cambio de concepto de coche en el que volcar los máximos recursos posibles. Por lo que los equipos sopesan intentar que se prorrogue hasta 2023. De este modo, incluso, se daba más tiempo a los equipos para desarrollar el monoplaza de la nueva reglamentación, actualmente además, está establecido el obligatorio parón que se da en verano.
La falta de ingresos de los equipos en estos meses, sin duda es otra causa, multiplicada por el desembolso en recursos que tendrán que hacer para el monoplaza de la nueva reglamentación. Por ello se prevé que, además de la posibilidad de prorrogar a 2023 la entrada del nuevo reglamento, se congele, al menos el 60 por ciento de los monoplazas actuales en este 2020 y 2021, por lo que las evoluciones y a su vez, el gasto, será mucho menor.
Así se pronunciaba Christian Horner al respecto:
“Es fundamental eliminar la necesidad de gastar para poder competir. Estamos discutiendo qué partes congelar. El monocasco está acordado y estamos analizando piezas internas de caja de cambios, suspensión delantera, ruedas etc. Probablemente el 60% del coche quedará congelado para este año y el próximo. También estamos hablando de retrasar un año más el nuevo reglamento, porque en mi opinión sería totalmente irresponsable asumir los costes en 2021. Al respecto, parece que hay un acuerdo razonable, pero debe ratificarlo la FIA.”