En 2015, el Circuit se convirtió en la primera pista de Formula 1 galardonada con el nivel de Excelencia por la FIA gracias a su compromiso con la sostenibilidad.
La Federación Internacional de Automovilismo (FIA) ha renovado en el Circuito de Barcelona-Cataluña la certificación Three Star Environmental Accreditation que concede su programa de sostenibilidad. El trazado catalán sigue demostrando una implicación medioambiental pionera en el mundo del deporte y de los circuitos, después de ocho años de reconocimiento.
En 2015, el Circuit se convirtió en la primera pista de Formula 1 que obtuvo la acreditación de nivel de Excelencia del programa de sostenibilidad de la FIA. Este proyecto busca mejorar la sostenibilidad en el deporte de motor a nivel mundial y contempla un marco de trabajo en la gestión medioambiental de los diferentes grupos de interés y ofrece iniciativas para avanzar en este ámbito de actuación.
La FIA ha certificado que la dirección del Circuito de Barcelona-Catalunya ha demostrado un compromiso a largo plazo con la mejora continua en acciones sostenibles, habiendo recibido la primera certificación ISO 14001 en 2008. Cuenta también desde el año 2021 con la certificación ISO 20121:2013 de eventos sostenibles por los Grandes Premios de F1 y de MotoGP y las principales competiciones internacionales que acoge, así como con el distintivo Biosphere. Además, el estudio «Racing towards a sustainable future. Review de la sustentación performance of international racing circuits» de la consultora Enovation Consulting, sitúa al Circuit dentro del top 2 de los circuitos más sostenibles del mundo entre un total de 97.
En su informe, la FIA ha destacado que entre las acciones llevadas a cabo, el “Circuit ha impulsado la movilidad sostenible, ha desarrollado una gran estrategia de comunicación que utiliza diversos medios y eventos y ha logrado cubrir el 33% de la demanda energética anual del Circuit a través de la mayor instalación fotovoltaica pública de autoconsumo de Cataluña. Además, ha contribuido a aumentar la concienciación, la educación y la participación ambiental de la sociedad y de los agentes implicados en sus actividades, así como a mejorar el uso del transporte público y el uso compartido del coche por los espectadores y uso de vehículos eléctricos por el personal que trabaja permanentemente en el Circuit”.