Este fin de semana, el Circuito Marco Simoncelli de Misano ha sido testimonio de una nueva sesión de entrenamientos de MotoGP. En unos tests privados protagonizados por Scott Redding, Aleix Espargaró, Cal Crutchlow, Valentino Rossi, Maverick Viñales, Andrea Dovizioso y el mallorquín, Lorenzo ha sido superior al resto de pilotos registrando un 1:31’9; quedando tan sólo a 32 milésimas de su mejor tiempo, 1:31’868, registrado en 2016 cuando el Espartano estaba en Yamaha.
Cada vez me encuentro mejor en la moto, tengo más experiencia y puedo llevarla al límite. Pude correr en tiempos muy rápidos si tenemos en cuenta el calor que hacía y las condiciones de la pista, tanto con neumáticos usados como con neumáticos nuevos. De hecho creo que ningún piloto de Ducati ha hecho 1’31″9 en esta pista, entonces es interesante y creo que encontramos una muy buena base para el GP, explicaba Lorenzo una vez bajó de su Desmosedici.
Lorenzo aprovechó para comparar también la Yamaha, con la que ha sido campeón del mundo, con la Ducati. Según el 99 de MotoGP ambas máquinas no tienen nada que ver entre sí; por lo que el paso del tiempo prolongado sobre una fábrica en concreto hace que los vicios sean mayores. No obstante, a pesar de reconocer que debido a la costumbre de la moto japonesa, le ha costado ser más rápido porqué necesitaba corregir sus costumbres.
La diferencia entre Yamaha y Ducati es muy grande, por eso me ha costado más tiempo ser rápido, pero cuando te acostumbras y descubres las características de la moto, he sido tan rápido como antes.
Finalmente, el futuro piloto de Honda también tubo tiempo para hablar sobre la situación del mundial y de su próximo compañero de equipo. Lorenzo reconoce que Marc Márquez es el gran favorito para alzarse con el título, aunque su intención es ganar el mayor número de carreras posibles a pesar de atravesar malos Grandes Premios como Assen y Sachsenring. No obstante comentó que hacerse con el número 1 no es imposible, aunque sí difícil.
Creo que Márquez es sin duda el favorito, no sólo por los puntos, sino también por su regularidad. Hemos tenido algunos GP difíciles, como Assen y Sachsenring, y ciertamente hay un circuito en el que todavía sufriremos como Phillip Island, pero en los demás tendremos el potencial de luchar al menos por el podio. Mi objetivo es ganar tantas carreras como sea posible y luchar por el segundo lugar en la clasificación. El título no es imposible, pero es difícil. Quiero ir carrera a carrera.