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Hamilton levanta el vuelo en casa

Después de una primera jornada de entrenamientos libres desastrosa para el líder del mundial, Lewis Hamilton, ha sido hoy el primero en la sesión de libres del sábado en Silverstone. Nico Rosberg ha terminado segundo, manteniendo el dominio de Mercedes y tercero Kimi Raikkonen que queda por delante de Vettel. El mejor de los españoles vuelve a ser Carlos Sainz, sexto muy cerca de Verstappen.


Se iniciaba la sesión de entrenamientos libres del sábado y los primeros pilotos que salían a rodar para comprobar el estado de la pista y el de su propio monoplaza eran Grosjean y Merhi aunque poco a poco el resto de pilotos hacían lo propio.

Los primeros en marcar tiempo eran los Lotus y Raikkonen que se ponía en cabeza.

Los Williams, agazapados ayer, hoy empezaban a mostrarse colocándose primero y segundo en la tabla seguidos del finlandés de Ferrari, Kimi Raikkonen y Fernando Alonso que era cuarto, después de que ayer los McLaren rodaran muy poco.

Pasados 20 minutos de sesión, todos los pilotos tenían un tiempo marcado excepto los Mercedes y los Red Bull. Vettel lideraba por el momento seguido de Bottas y de Sainz.
Pocos minutos después, salían los Mercedes y después de una primera vuelta mala, ambos se ponían primero y segundo y era Hamilton el que lideraba por primera vez por delante de Rosberg, pero el alemán le sacó 6 décimas a su compañero y recuperaba la primera plaza gracias a que la pista estaba mejorando mucho de hecho Hamilton recuperaba la primera plaza instantes después.

Algunos pilotos seguían rodando con los duros, mientras que otros esperaban en boxes hasta que llegara el momento de montar los blandos y así ahorrar kilómetros para su motor.

Rosberg tendría difícil rodar con blandos porque sufría una fuga de aceite en su caja de cambios.
A falta de 15 minutos la gran mayoría estaba en boxes y ya saldrían a rodar con blandos en los últimos instantes de la sesión.

El primero en salir con el neumático blando era Bottas con el Williams a falta de 9 minutos y poco a poco le seguían un gran número de pilotos. El que no saldría seguro era Alonso que también con un problema en el sistema hidráulico se bajaba del coche.

Todo el mundo iba bajando los tiempos aunque nadie podía batir a Hamilton que se atrincheraba en la primera plaza. Rosberg al final podía rodar pero por culpa del tráfico no ponía en peligro la posición del inglés.