El título suena melódico casi sin querer, relacionar la victoria de un Schumacher en Monza es la cuadratura de un círculo que, contra pronóstico, puede cerrarse en un año en el que Micke está operando de menos a más. Gran salida del alemán para asegurar su primera victoria del año (se sube al carrusel de ganadores diferentes en 2020)
La salida de Mick ha sido un presagio de lo que la carrera podía depararle al alemán, con un ritmo inicial infernal que solo Ilott ha podido contener, golpeado de nuevo por una mala suerte -esta vez en boxes– que puede haber perdido definitivamente el mundial tras la debacle sucedida en Spa-Francorchamps.
Carrera sin grandes altibajos y sin ningún SC- algo raruno en F2- pero con un festival estratégico y de adelantamientos, liderado en entretenimiento por el británico de la FSD, Callum Ilott, logrando una remontada de libro tras calar su Uni-Virtuosi en boxes, algo que le ha apartado de una victoria que tenía clara con el ritmo que estaba atesorando.
Quien ha tenido hoy un día apartado de los focos ha sido Shwartzman, que ha conseguido minimizar daños metiéndose en el Top 10 tras salir prácticamente atrás en la parrilla. La ‘pole’ de mañana será para un Deletraz, el cual tiene la oportunidad de resarcirse tras perder ritmo en una temporada en la que empezó con podio y grandes sensaciones.
Gran carrera de Zhou logrando una P5 muy lograda aprovechándose de su estrategia inversa, remontando la friolera de 12 posiciones tras un infernal stint final con el neumático blando. El top 10 se ha cerrado de la siguiente manera: Schumacher, Ghiotto, Lundgaard, Tsunoda, Zhou, Ilott, Ticktum, Deletraz, Shwartzman y Daruvala, cerrando el de Carlin la zona de puntos tras otra carrera discreta para el hindú de Red Bull.
El campeonato se apreta tremendamente con ‘Rob’ primero con 134 empatado con Ilott y con Schumacher con 131.