Di Grassi impone su ritmo demoledor y vence en el ePrix de Zurich

El semáforo se apagaba dando inicio a la primera carrera de Formula E disputada en la localidad suiza de Zurich. Pronto, Jean-Eric Vergne subía hasta posiciones de puntos después de protagonizar una mala clasificación. Por su parte, Daniel Abt y Nelson Piquet Jr se tocaban en la primera vuelta, teniendo que parar los dos a cambiar sus respectivos alerones para poder seguir en carrera.

Pasadas diez vueltas, Evans comandaba la carrera seguido de no muy lejos por Lotterer, Bird, di Grassi, Buemi, D’Ambrosio, López, Rosenqvist, Prost y Vergne. Los diez primeros formaban un tren más o menos homogéneo en el que entre coche y coche había un segundo de diferencia.

Unas vueltas después, Di Grassi arrancaba “su cohete” y se colocaba por delante de Bird. López volvía a la sexta posición por delante de D’Ambrosio y Rosenqvist.

Y ni una vuelta esperaba el brasileño para pasar esta vez a Lotterer, colocándose de esta forma en segundo lugar. Por detrás, Vergné adelantaba a Prost.

En la siguiente vuelta Di Grassi ya estaba a tan solo dos décimas de un Evans que, sin tiempo para poder reaccionar, veía como el cohete brasileño le arrancaba las pegatinas en la larga recta de meta gracias a la aspiración.

En la 19ª vuelta dirección de carrera decidía abrir un procedimiento de full course yellow debido a unos restos de alerón en medio de la pista que Vergne se llevaba por delante. Inmediatamente todos los pilotos paraban a box porque este procedimiento de bandera amarilla coincidía con la hora de cambiar de monoplazas. Tras la parada, los tres primeros clasificados mantenían sus posiciones, Buemi se colocaba cuarto por delante de Bird, que era seguido por López, D’Ambrosio, Prost, Vergne y Heidfeld. El francés de Techeetah sufría problemas en su cambio y perdía la posición con Prost.

Cuatro vueltas después, Vergne volvía a superar a Prost y se acercaba peligrosamente a D’Ambrosio y López. Mientras tanto, en cabeza de carrera, Di Grassi aventajaba a Evans en más de dos segundos.

A poco más de diez vueltas para el final, Buemi se situaba muy cerca de Lotterer con la intención de subir al podio ante su afición.

A ocho vueltas para el final, Vergne se colocaba séptimo tras pasar a D’Ambrosio y reducía su distancia con Bird -su inmediato perseguidor en el campeonato- a tan solo dos posiciones. El final sería muy distinto para los dos.

A falta de cinco vueltas para el final la catástrofe se cernía sobre cuatro pilotos: Lotterer, Evans, Vergne y Buemi recibían un drive throught por no respetar el límite de velocidad durante el procedimiento de full course yellow. De esta forma, Bird subía hasta la segunda posición mientras su máximo rival en la lucha por el campeonato, Vergne, caía hasta la décima posición. D’Ambrosio era tercero, Lotterer conseguía finalmente remontar hasta la cuarta posición, Buemi era quinto, Heidfeld sexto, Evans séptimo, D’Acosta octavo y Turvey noveno (había clasificado noveno).