En la última ronda del WRC en Portugal el pasado fin de semana, Kris Meeke tuvo que ser trasladado al hospital por vía aérea para realizar controles tras un violento accidente.
Había sido contratado para encabezar el regreso de Citroën al WRC en 2017, pero acabó séptimo en el campeonato y quedó fuera del equipo por un breve periodo de tiempo a principios de verano, después de un mal comienzo de temporada.
Pierre Budar, director del equipo, dijo que los accidente de Meeke le habían llevado a decidir cambios en la alineación por motivos de “seguridad”.
“No fue una decisión fácil porque afecta a un conductor y a un copiloto, pero se basa en gran medida en cuestiones de seguridad que me preocupan como director del equipo. En consecuencia, hemos tomado esta decisión como medida preventiva.”
El comunicado de Citroën anunciando el cese de Kris Meeke subraya que se le retira “debido a un número excesivamente alto de accidentes, algunos muy fuertes, que podrían haber tenido consecuencias graves para la seguridad de la tripulación” y añade que los riesgos asumidos por Meeke eran “injustificados por las apuestas deportivas en juego”.
Citroën aún tiene que anunciar su plan de pilotos para el resto de la temporada. Craig Been y Mads Ostberg estarán en la próxima ronda en Cerdeña.
Sebastien Loeb, nueve veces campeón del WRC, tiene programada una aparición en su vuelta de tres eventos con Citroën, será en España al final de la temporada.
Foto: WRC