El piloto ruso Daniil Kvyat se ha visto envuelto en otro lío con Sebastian Vettel, esta vez en el Gran Premio de Rusia, ahora la culpa indudablemente fue del piloto de Red Bull.
En el pasado Gran Premio de China, Vettel embistió con Kimi Räikkonën y fue adelantado por Kvyat, y tras terminar la carrera, fue a reclamar a Daniil la maniobra, tratando de justificar el error de Raikkonen. Tal vez Vettel estuvo alterado por las emociones que provocan un Gran Premio de F1, ya que la maniobra de Kvyat fue limpia y correcta.
Kvyat subió al podio y fue elegido el piloto de la carrera, pero en el Gran Premio de Rusia, en su carrera de casa, Daniil tomó una actitud impropia de un piloto de su talla y embistió al piloto de Ferrari dos veces en la salida, como si deseaba adelantarlo a toda costa en las primeras vueltas. A mi parecer, en Kvyat pesó lo del incidente del Gran Premio de China, y se excedió en agresividad.
Errores lo cometieron grandes pilotos, el mismo Sebastian Vettel que fue a reclamar a Christian Horner, jefe de Kvyat, y a hablar pestes del ruso, cometió varios errores que costaron más caro inclusive al equipo, como en Japón 2007, Turquía 2010, Canadá 2011.
En cuanto a fortaleza y tranquilidad mental, Kvyat tiene un muy buen historial, dejando una impecable imagen desde categorías inferiores. Casi nunca hemos visto maniobras torpes de adelantamiento por parte del ruso e inclusive en su temporada debut en F1 en 2014 no recuerdo incidentes.
Pero todo eso, ahora puede ir al tacho de basura. La presión de poder ser reemplazado por Max Verstappen más el juego psicológico con Vettel tal vez influyó en el ruso. Antes, en Red Bull no tenían excusas para quejarse del rendimiento de Daniil, que se complementó muy bien con Ricciardo y tuvo un rendimiento parejo al de su más experimentado compañero de equipo -inclusive lo superó por pocos puntos- pero tal vez a partir de ahora, la historia puede ser diferente.