Marcus Ericsson mantiene la IndyCar como una de sus opciones para 2019 junto con su rol de piloto de pruebas en Sauber.

Después de cuatro años en Sauber y cinco como piloto de Formula 1, Ericsson ha sido relegado al rol de piloto reserva para 2019 después que el equipo suizo firmara a Kimi Räikkönen y Antonio Giovinazzi como nuevos pilotos para la próxima temporada.

Esto ha abierto la puerta al sueco a asegurarse un programa de carreras aparte de su rol como tercer piloto. Entre la gran cantidad de opciones que tiene, la IndyCar es una de las que esta en la lista definitiva.

«Creo que la IndyCar es divertida, así que es algo que quiero probar, pero también hay otras opciones que parecen interesantes Por el momento, no me cierro ninguna puerta» explicó Ericsson a los medios en el circuito de Sochi tras el Gran Premio de Rusia.

Aunque reconoció que la contratación de Räikkönen fue una noticia muy dolorosa para él ya que sólo un mes estaba convencido de que tendría sitio en la Formula 1 en 2019, el sueco se muestra ilusionado con su futuro: «Quiero mantener todas las opciones abiertas y combinarlo con mi rol en Sauber«.

«Las cosas cambian muy rápido en el paddock y, lamentablemente, cambiaron para mal. Obviamente es decepcionante no correr más carreras, pero por otra parte estoy contento de poder continuar vinculado al equipo«, declaró.

«Mi objetivo sigue siendo volver a la Formula 1. Creo que para 2019 eso no va a suceder, pero espero que más adelante sí que haya posibilidades de volver. Ese sigue siendo mi objetivo número uno«, añadió.

Ericsson empezó carrera en la Formula 1 con Caterham en 2014 y un año después se incorporó a Sauber, con quien ha estado compitiendo desde 2015. Ha sido una dura etapa para el sueco, que sólo ha podido sumar 15 puntos en cinco temporadas.