Ross Brawn, director deportivo de la F1, descarta la eliminación del DRS a corto plazo.


Hay DRS para días. Uno de los sistemas más polémicos de los actuales monoplazas de la F1 seguirá vigente, al menos a corto plazo. Así lo confirmaba Ross Brawn cuando era preguntado por el sistema de reducción de arrastre.

Así pues, los detractores de este sistema deberán esperar al futuro para ver como desaparece, lo que muchos consideran, una ayuda que facilita demasiado los adelantamientos en la F1. Quizás si no existiera serían otros los que criticarían a la F1 por tener demasiado pocos adelantamientos, como ocurría en el pasado, pero esto ya es temática de opiniones y gustos.

A palabras del director deportivo a la revista Business Life, el DRS continuará «a corto plazo» ya que alega que los actuales monoplazas necesitan de este sistema: «Espero que cuando identifiquemos cómo evolucionen los automóviles en el futuro, esa sea una característica que podamos desactivar. Pero no lo veo desaparecer en un futuro cercano. Es un parche necesario debido a la naturaleza de los monoplazas en este momento», afirmaba Brawn.

Pese a que no van a eliminar el DRS, reconoció que trabajan para encontrar la manera de facilitar los adelantamientos sin la necesidad de este sistema artificial: «Ese es nuestro objetivo. Y a diferencia del DRS, no será un cambio que activemos de la noche a la mañana, será una evolución de los monoplazas. Cada paso que hacemos tiene que ser en esa dirección», confirmaba el director deportivo de la F1.

Desde Pirelli apuntan que la pasada temporada se produjeron un 47% de intentos de adelantamiento menos que el año 2016. Casi la mitad menos. Esto también se explicaría por la introducción de la nueva reglamentación con mayor carga aerodinámica en los monoplazas.

Además, el tiempo por vuelta también fue más lento que el año anterior, aunque Brawn no lo ve como algo negativo, sino al contrario: «La velocidad de los autos es importante: estos son los autos de carreras más rápidos del mundo, y los fanáticos quieren sentir que la Fórmula Uno es el pináculo. Pero mañana si pudiera ir a cinco millas por hora de velocidad máxima para una mejor carrera, lo haría», decía Brawn.