La joven piloto de karting Belén García probó por primera vez un Fórmula 4 en un test realizado en el Circuito de Barcelona-Cataluña a mediados de este mes de diciembre.

Después de haber terminado esta temporada en décima posición en la clasificación final del Campeonato de España de Karting (CEK) en la categoría KZ2, el equipo Global Racing Service ofreció a Belén García la opción de realizar un test privado con un monoplaza de Fórmula 4 en el Circuito de Barcelona-Catalunya.

La piloto de la Ametlla del Vallès completó con éxito su primera experiencia con un Fórmula 4 y quedó muy satisfecha. Al principio le costó, pero poco a poco se fue adaptando a las condiciones de la pista y del coche, dejando muy buenas sensaciones teniendo en cuenta que se estrenaba con un monoplaza de estas características.

Belén García al finalizar el test explicó sus sensaciones de la prueba a FormulaRapida.net: «Al principio ha sido difícil… en la primera tanda la pista estaba muy fría y a la mínima el coche se iba de atrás. Costó encontrar confianza, pero en la segunda tanda ya con un poco más de calor me relajé, todo empezaba a tener más sentido. Empecé a girar, frenar bien, a dar gas un poco más temprano…».

La frenada fue uno de los aspectos que más trabajó la piloto catalana a lo largo de la jornada de test. «Estuvimos trabajando todo el día en la frenada, al dar gas antes y al final conseguí mejorar. El equipo me ayudó muchísimo, estaba todo perfecto, no falló nada, me apoyaron mucho y me dieron todas las herramientas para sentirme cómoda», decía García.

Después de correr prácticamente toda su trayectoria en competiciones de karting, Belén García valoró la diferencia que supone subir a un monoplaza: «Es otro concepto, hay mucha parte que se basa en tener confianza con el coche. Tienes que hacer mucha fuerza para que frene bien, y al principio si no tienes la confianza, no sabes dónde está el límite o cuánta fuerza tienes que hacer. En karting el límite es más fácil de encontrar».

«También encontré mucha diferencia en el paso por curva. Con Formula 4 lo que noté es que siempre podía pasar más rápido de lo que pensaba, incluso yendo más rápido tenía más adherencia, es ir un poco en contra de lo que te dice la cabeza. Fue una sensación muy curiosa, buenísima y hacen falta más vueltas para terminar de asimilarlo», añadía la española.

En general, Belén García quedó satisfecha por todo lo que vivió durante la jornada, aunque le quedó una espina clavada. «Fue una pena que en la última tanda que pusimos una rueda casi nueva aparecieran dos banderas rojas. No pude hacer ninguna vuelta buena. Estoy convencida de que podía hacer un muy buen tiempo, siempre teniendo en cuenta que era el primer día», explicaba.