El BMW #43 lideró desde el inicio, pero una penalización en una resalida ha hecho que cedan el liderato al BMW #100 con 8 horas por delante.

Con el safety car en pista, y el Bentley #18 de Soucek en boxes cambiando la caja de cambios, daba comienzo la tercera hora de carrera en Mount Panorama. Chaz Mostert continuó con su ritmo infernal, volviéndose a escapar de Winkelhock, que rodaba segundo, nada más se dio la bandera verde.

Laurens Vanthoor comenzó a recuperar posiciones con el Porsche #991. El piloto belga adelantó al Bentley #17 para escalar hasta la cuarta posición. Después de rodar en paralelo en Conrod, Vanthoor adelantó a su hermano Dries, para después superar al Audi #22 de Fréderic Vervisch.

La carrera volvió a neutralizarse una vez más, esta vez después de que el BMW M4 GT4 #44 golpeara el muro en Forrest Elbow. Esto lo aprovecharon la mayoría de los equipos para entrar en boxes, incluyendo al BMW #43 de los líderes, donde Mostert cedió el relevo a Marco Wittmann, completando así un stint perfecto en La Montaña.

Cuando se relanzó al carrera, no tardó en salir de nuevo el safety car. El Audi #3 se estrelló contra el muro en la primera curva, quedando destrozado. Unos instantes antes, el Mercedes #75 pilotado por Tristan Vautier, había rozado el muro en la zona de la subida. Esta quinta salida del coche de seguridad también hizo que algunos coches entraran a boxes.

Después de un sexto periodo de coche de seguridad, por una rueda suelta en el Daytona Coupe #65, se volvió a relanzar la carrera. Durante esta última neutralización, el Bentley #18 de Soucek volvió a carrera, con 25 vueltas perdidas. Tim Slade tomó el liderato de la carrera por delante de Marco Wittmann y Steven Richards.

La carrera entonces dio un vuelco, cuando la organización anunció una penalización para el BMW #43, por colocarse en paralelo antes de meta en una resalida. Wittmann tuvo que cumplir el drive throught y cayó hasta la décima posición.

Slade cedió con su parada en boxes el liderato a Richards en el BMW #100, justo antes de que volviera a salir el coche de seguridad. En esta ocasión fue por un espectacular reventón del Bentley #18 de Soucek, pilotado por Maxime Soulet en ese momento. El piloto belga rodaba a máxima velocidad entrando en «The Chase», cuando una de las ruedas delanteras de su Continental GT3 explotó. Soulet pudo controlar el coche y no impactó contra ninguno de los coches que le precedían.

La carrera continúa su curso, y con todavía 8 horas por delante, todo puede suceder en La Montaña.