No existe duda de que la temporada 2020 ha sido una de las más difíciles en términos de rendimiento para la Scuderia Ferrari.

El equipo de Maranello acabó sexto por cuarta vez en su historia desde que hiciera su debut en 1950 y por primera ocasión desde 1973. Los hombres de rojo rubricaron su peor registro en la tabla de clasificación desde 1980, cuando se colocaron penúltimos (décima colocación) tan solo por delante de sus coterráneos de Alfa Romeo.

Además de ello, junto a Alpha Tauri, al tener su sede en Italia, tuvieron que cerrar sus puertas antes que los demás equipos debido a las primeras decisiones de clausura debido a la evolución desmesurada de la COVID19, hecho que puso freno por completo en el desarrollo del coche SF1000.

Una vez comenzada la F1 el 5 de julio, durante los 17 Grandes Premios, los italianos solo pudieron firmar 3 podios, dos alcanzados por Leclerc y uno por Vettel sobre el trazado turco que volvía a hospedar un Gran Premio desde 2011, y no solo eso, sino que también fue el lugar donde Hamilton logró igual otro récord de Michael Schumacher, el séptimo Campeonato Mundial.

Durante los días de cuarentena donde no hubo acción en pista, pero si en los despachos de varios equipos, vino como variedad de pilotos cambiarán de colores para 2021. Vettel y Sainz, son ejemplos de este hecho, y no solo eso, sino que pareciera que sus destinos tienen que ver el uno con el otro, ya que en 2014 cuando Sebastian sale de Red Bull para fichar por Ferrari en 2015, esto le abrió la puerta a Carlos para que ingresara en Toro Rosso.

Ahora para 2021, y luego que los del norte de Italia no decidieran renovar al alemán, el madrileño tomará su lugar donde pretenderá no ser eclipsado por el monegasco, quien ya cuenta con un par de temporadas con la indumentaria roja y que en teoría tendrá la tarea de ejercer de líder dentro del seno de equipo del Cavallino Rampante. La ventaja que tiene Sainz es su experiencia en F1, siendo superior a la de Charles, quien debutó 3 años después de que lo hiciera el piloto ibérico en 2015.

Para 2021, Ferrari, ha apostado por juventud y experiencia para esta temporada 72 de la Fórmula Uno, donde por primera vez ninguno de sus pilotos es Campeón del Mundo, y quienes incluso conforman tanto Leclerc como Sainz, la dupla más joven en Ferrari con una de edad de 24,5 años, desde que lo hicieran en 1968, Chris Amon y Jacky Ickx, con una media de 23,5 años.

Atrás han quedado los años donde los transalpinos dominaban la categoría, y en Ferrari son conscientes de ello y pretenden devolver la gloria al apellido del equipo del “Drake”, pero ante con cautela, ya que las nuevas normativas y la situación mundial no es algo que pareciera que fuese a acabar pronto.

Si bien a partir de este año comienza la implementación del techo presupuestario y las dos fichas por equipo permitidas para desarrollar aquellas zonas permitidas dentro del coche, Ferrari espera por o menos estar dentro del Top 3, donde desarrollarán mejoras en la parte trasera de la nueva SF21, una aerodinámica más estable y eficiente, incluirán una nueva caja de cambios, donde la carrocería será más larga que la de su predecesora. Igualmente llevarán a cabo mejoras en el motor, implementando nuevas cabezas de cilindros para que esto favorezca en una mayor presión dentro de la cámara de combustión, nuevos pistones, además de mejoras en la unidad eléctrica, donde esperan contar una mejoría en la recuperación de energía más eficiente.

En definitiva, no parece tarea sencilla para Ferrari retornar a su condición de Campeón que tanto extrañan los tifosi; pero nada es imposible, y en la Fórmula Uno hemos podido ver que todo puede suceder.

De momento, nos queda esperar unos cuantos días más a que comience la pretemporada ya confirmada en Bahrain el próximo 12 de marzo, que seguro todos vosotros al igual que quien escribe, está impaciente de que la F1 vuelva a encender sus motores.