La temporada 2014 fue el inicio en la implementación de los motores turbo híbridos en la categoría. La Scuderia de Maranello, en su intento por batir a Red Bull entre 2010 y 2013, quedaron sus esperanzas en vano con dos Subcampeonatos en 4 años. 

El piloto que acabaría con las esperanzas de los italianos entre las últimas cuatro temporadas (2010-2013) en la que escucharíamos sonar los motores V8 en cada uno de los circuitos del «Gran Circo», sería el mismo que se embarcaría desde 2015, en la aventura de soportar en sus hombros y devolver la gloria extraviada desde 2007 al equipo de un país entero. Hablamos de Sebastian Vettel.

Para infortunio de los transalpinos y de todos los aficionados de este equipo, el dominio del equipo de las flechas de plata, aplastó cualquier ápice de optimismo por conseguir buenos resultados al final de alguna temporada.

Yéndonos a Malasia 2015, la primera victoria de Sebastian vestido de rojo, y al escuchar las letras de los himnos nacionales de Alemania e Italia, fue una sensación de regresar al pasado, cuando quien escribe y vosotros que ahora mismo están leyendo este artículo, teníamos unos cuantos años de menos. Cada quien tendrá su referencia y momentos que lo transporten a sus niñez, sin embargo, la mía se identifica con escuchar gran parte de los domingos, las melodías del «Das Deutschlandlied» seguido por el «Il Canto degli Italiani».

La era turbo-híbrida no ha calado muy bien en las filas de Ferrari, quienes de momento durante 6 temporadas desde 2014 hasta 2019, han logrado 4 Subcampeonatos (2015,2017,2018 y 2019), no sin antes mencionar, a pesar de esta posición, lo lejos que han estado de Mercedes.

Seis temporadas de F1 se traducen en 121 Grandes Premios, donde los podios se multiplican por dos debido a que cada equipo cuenta con dos pilotos en su escuadra.

Vámonos ahora a los datos que ha rubricado Ferrari durante este sexenio: 17 victorias (14,05%), 21 poles positions (17,35%) y 92 (38,02%) de los 242 podios posibles durante este período; siendo 2017 (5 victorias, 5 poles y 20 podios) y 2018 (6 victorias, 6 poles y 24 podios) las temporadas más destacables del equipo.

Sin duda, que para un equipo que los primeros puestos era algo para acostumbrarse, a estas alturas viendo los resultados no parece que las cosas sean tan sencillas por alcanzar en la máxima categoría, el camino será largo y no podemos omitir que todavía falta por demostrar el rendimiento de la SF1000, nombre que conmemora los mil Grandes Premios de Ferrari en la F1.

Seguimos atentos sobre lo que nos deparará el futuro durante este 2020 en la F1, donde los motores volverán a inyectar gasolina y las gomas volverán a rozar el asfalto este próximo 5 de julio en Austria, sobre el Red Bull Ring.