Dos días después de la conclusión de la primera cita del calendario, los pilotos han dejado sus impresiones tras completar un Rally de Montecarlo de lo más duro. De forma general, todos los participantes han coincidido en la dureza que ha mostrado tener esta prueba, mucho más de lo que esperaban algunos. Alegrías, decepciones y ganas de llegar a Suecia son las sensaciones por las que se han dejado llevar los pilotos de los principales equipos del WRC. 


El Rally de Montecarlo es la prueba del Mundial de Rallyes más mítica y legendaria que queda en el calendario actual. Las condiciones, normalmente, suelen ser de las más duras que se encuentran a lo largo de todo el año, pero este 2018 se ha caracterizado por una extrema dureza que ha complicado aún más la vida a los participantes.

«Siempre nos enfrentamos a condiciones difíciles en el Rally de Montecarlo, pero este año fueron realmente extremas». Estas fueron las palabras de un cinco veces campeón del mundo que ha logrado su quinta victoria consecutiva en esta cita. Un poco paradójico visto, resultados en mano, el paseo plácido que ha tenido Sebastien Ogier para ganar la prueba. No obstante, no ha sido un camino de rosas para el francés, quién tuvo varios contratiempos durante los cuatro días de acción que le pusieron en apuros para incluso terminar la histórica cita.

Aún así, la sensación ha sido de que M-Sport Ford no tiene tampoco un coche dominador para esta temporada. Los tramos han tenido gran variedad de ganadores, con victorias para las cuatro marcas principales del WRC. Esto hace veticinar que el Mundial de Rallyes podría tener, de nuevo, una temporada muy igualada con grandes emociones por delante. «La competencia será más fuerte que nunca y hemos empezado bien, lo cual es realmente importante», comentó Sebastien Ogier tras su quinta victoria en el ‘Monte’.

Doble alegría en Toyota

También ha sido la oportunidad para mostrar el potencial de los equipos, muy parejos en efectos de ritmo en este rally. Uno de los que ha quedado más sorprendido ha sido Ott Tänak, quién pasaba de dejar a los campeones de M-Sport por el nuevo proyecto de Toyota. Y la sensación ha sido positiva, un segundo lugar y peleando hasta el final por la victoria. «Es realmente agradable comenzar la temporada así. ¡Parece que me he unido a un equipo muy fuerte! El coche ha sido increíble y me he sentido muy cómodo desde el inicio del rally», afirmó el piloto de Estonia tras bajarse del podio en Montecarlo.

Un podio que lo ha completado Jari-Matti Latvala tras verse en tierra de nadie durante casi todo el rally. Sin presiones por delante ni por detrás, el finlandés empieza el campeonato con un primer podio y con la prueba que ganó el año pasado a pocas semanas vista. «El equipo ha hecho un excelente trabajo y el coche está funcionando muy bien, así que estoy emocionado por la temporada que viene», comentaba Latvala coincidiendo con su compañero Tänak. Aún así, también coincidió con su excompañero Ogier con que «estoy realmente aliviado de llegar a la meta y estar en el podio», dadas las difíciles condiciones de la prueba.

Otro de los que Montecarlo parecía haber engullido al inicio del rally ha sido Kris Meeke. «Fue el Montecarlo más duro que jamás haya experimentado», exclamaba exhausto de estos tres días trepidantes. El británico, no obstante, fue de los que más problemas tuvo pero también el que mejor supo rehacerse, llegando al cuarto lugar y ganando la Power Stage final. «Estoy sorprendido de terminar el rally con diecisiete puntos, ahora toca seguir trabajando duro para tratar de mejorar», concluyó.

Fin de semana inaugural negro para Hyundai

En Hyundai las cosas no fueron, para nada, como esperaban. Ninguno de los tres pilotos tuvo suerte y ninguno acabó satisfecho con los resultados obtenidos en este inicio de año. Montecarlo prometía mucho y dio poco a la marca coreana. «Sin el pinchazo y las difíciles condiciones de nieve del sábado, todavía habría sido posible un podio», se lamentaba Thierry Neuville tras ganar dos posiciones en la última especial y finalizar dentro el Top5. Aún así, el belga esperaba luchar por la victoria tal y como hizo en 2017.

Los dos más perjudicados fueron Dani Sordo y Andreas Mikkelsen, ambos abandonando el sábado y el viernes, respectivamente. «Estoy realmente decepcionado. No empujamos demasiado, pero de repente perdimos agarre por delante y nos fuimos fuera. Sin Rally 2, ese fue nuestro Montecarlo», decía el español muy frustrado tras abandonar la prueba. Sordo no se reincorporará al equipo hasta México, pues será sustituido por Hayden Paddon en Suecia.

Mikkelsen, por su parte, si acabó el rally tras reincorporarse el sábado y, a pesar de su posición final, las sensaciones fueron buenas con el coche. «Es mi mejor sensación hasta el momento con el coche sobre un asfalto seco, lo cual es alentador», afirmaba el noruego tras finalizar la Power Stage que le otorgó los dos primeros puntos del año.

Contratiempos y decepciones para la mayoría

Mientras Sebastien Ogier celebraba la victoria, su compañero se lamentaba de una discreta actuación en su vuelta al equipo principal del M-Sport. Elfyn Evans finalizó sexto su primera prueba del calendario y lo hizo con una gran remontada de diez posiciones durante los tres días. «Ha sido una edición difícil del rally este año y hemos tenido un comienzo especialmente duro al perder tanto tiempo en la primera etapa. Lo reconfortante es que la velocidad está ahí, pero aún necesitamos ser mejores», recalcaba el piloto británico haciendo autocrítica en este primer rally.

Pese a tantas decepciones, la frustración más grande se la ha llevado Esapekka Lappi. Rally impecable para el finlandés, quién llegó a rodar en posiciones de podio y se mantuvo cuarto hasta la penúltima especial. No obstante, un error en la Power Stage le condenó a pasar del cuarto al séptimo puesto final, un duro golpe moral del que se espera recuperar en Suecia. «Por el momento estoy bastante decepcionado, pero al menos completé todos los kilómetros, adquirí experiencia y aprendí muchas cosas, por lo que también hay muchos aspectos positivos», comentó con caras largas Lappi.

Las dos últimas posiciones de los vehículos de WRC se las adjudicaron Bryan Bouffier y Craig Breen. El francés tuvo un gran contratiempo antes de empezar el rally y tuvo que cambiar de copiloto, por lo que el resultado ha sido satisfactorio con tan solo terminar la prueba. «Es un buen comienzo y espero aprender aún más cuando vuelva al volante en Córcega«, apuntaba Bouffier. Por otro lado, Breen tuvo infinidad de problemas que le impedieron remontar. «Las cosas fueron de mal en peor con los problemas de frenos del viernes, lo que nos dejó abriendo el camino como una especie de quitanieves el sábado», decía desquiciado el irlandés.

Finalmente, Teemu Suninen también hizo una valoración de su estreno con M-Sport Ford este fin de semana. No fue con el tercer coche del equipo -que sí cogerá en Suecia-, pero la primera experiencia con el R5 de WRC2 con el equipo inglés tuvo altos y bajos que marcaron su rally. «Pasaremos un par de días recuperándonos de este evento, y luego todo nuestro enfoque estará en Suecia«, concluyó el finlandés, que debutará con el equipo oficial de WRC en Suecia.