El doblete en la clasificación le da a Red Bull una gran oportunidad para llevarse la victoria, pero detrás saldrán los dos gallos del campeonato con monoplazas más rápidos y un kilómetro de recta por delante.

Superar esta primera prueba es clave para las opciones de victoria de Red Bull, ya que después pueden centrarse en el tercer sector (en el que son los más rápidos), conseguir unos metros para aguantar los pasos por la recta. Hamilton y Vettel tratarán de echarle mano a los Red Bull cuanto antes mejor. Hay que tener en cuenta que Red Bull ha sido el equipo más rápido todo el fin de semana, por lo que si Hamilton y Vettel no son capaces de pasarles al principio, los Red Bull podrían escaparse. Bottas y Räikkönen parecen destinados a una pelea de tu a tu por la quinta posición.

La lucha por los puntos la librarán los Renault, que salen por delante, Sauber, que al igual que Renault saldrán con los neumáticos hiperblandos, por lo que deberán tratar de alargar la vida de sus neumáticos para poder ir a una parada. Esto será importante, porque justo detrás salen los Force India y Fernando Alonso, que pueden elegir neumático y problablemente evitarán el compuesto más blando para optar por uno más duradero. Detrás de ellos, los Toro Rosso tratarán de mantenerse cerca para pescar en río revuelto. No parece que vayan a tener mucha presión de los Williams ni de Vandoorne.

Estamos frente a una carrera con un nivel de incertidumbre sobre las opciones de victoria incluso más grande que la semana pasada en Austin, es muy difícil saber quien de los 6 primeros va a llevarse la victoria y podríamos volver a tener a 3 o incluso más pilotos en una lucha cuerpo a cuerpo durante gran parte de la carrera. A diferencia del GP de Estados Unidos, donde Räikkönen, Hamilton y Verstappen hicieron estrategias diferentes, todos saldrán juntos.