El tres veces campeón del mundo de Fórmula 1, Niki Lauda sigue en el hospital de Viena con su recuperación tras el trasplante de pulmón de la pasada semana.

Lauda entró la semana pasada al hospital general de Viena con una fuerte gripe que le había dejado el pasado mes reposando en Ibiza sin ir a las dos últimas carreras en Alemania y Hungría. Su situación empeoró sensiblemente y tuvo que ir de urgencias a Viena para hacer el trasplante de pulmón.

La cirugía fue satisfactoria y estuvo en manos de Walter Klepetko, jefe de departamento de operaciones torácicas del clínico. Konrad Hotzenecher fue su ayudante. Toda la familia Mercedes, aficionados e oponentes le desearon una rápida recuperación.

La última actualización del hospital fue de ayer y el comunicado comentaba que el austríaco era capaz de respirar sin ningún problema y que incluso está sin apoyo de ninguna máquina. Añadía también que evoluciona favorablemente y que va por buen camino, eso no quita el hecho que Lauda tenga que mantener reposo en el hospital y estar en cuidados aún hasta su total recuperación.

«El AKH de Viena y la MedUni de Viena les place comentar el satisfactorio curso que sigue el estado de Niki Lauda tras su trasplante el pasado día 2 de agosto. 24 horas tras la operación, Lauda ya estaba totalmente consciente y era capaz de respirar independientemente, sin ninguna máquina que le ayudase«, rezaba el comunicado.

«Desde entonces, hemos visto una mejora continua en su estado. Todos los órganos trasplantados están funcionando bien y los propios de Niki han tenido una buena aceptación. El paciente continuará en cuidados hasta su total recuperación en el AKH de Viena», añadía.

Por suerte, el austríaco ha despertado hoy del coma inducido y se encuentra con su familia. Según el doctor, Lauda volverá a ser «el mismo de siempre».