Hoy el viaje en el tiempo nos trae un punto de vista especial, el de un niño de apenas 8 años que iba por primera vez a ver una carrera de Fórmula 1. El viaje de hoy tendrá la habitual crónica de la carrera con algunos toques personales e impresiones que solo se pueden transmitir si lo has vivido en directo. Así pues, Adrià Santos, nos narra su primera vez en la Fórmula 1.

Antecedentes

Fernando Alonso llegaba como gran favorito a la cita Barcelonesa gracias a 2 victoria y 3 segundos en tan solo 5 carreras. La llamada «Marea Azul» se desplazaba a la ciudad condal batiendo récords históricos de asistencia en Montmeló. La corriente Ferrarista hacía frente tiñendo el Circuit de rojo y azul. Y es que los tifosi tenían a Michael Schumacher en segunda posición en el campeonato con también 2 victorias, y después de un mal 2005, volvían a creer en el 7 veces Campeón del Mundo.

Por detrás, el subcampeón del 2005, Kimi Räikkönen, junto con Giancarlo Fisichella y Felipe Massa, no querían que los dos Campeones del Mundo se escaparan en la general. La pelouse estaba llena de aficionados esperando impaciente el inicio de las primeras sesiones, con protagonistas secundarios que podrían dar alguna sorpresa como Toyota, Honda o Williams.

Normativa de la temporada

La clasificación se dividía en 3 sesiones. En la primera y en la segunda sesión, los 6 peores tiempos eran eliminados y no podían acceder a la siguiente, quedando solo 10 en la última sesión. El más rápido en esta se llevaría la pole position. La carga de gasolina con la que se realizara esta sesión era libre para toda la sesión y sería la utilizada durante la salida.

Las paradas en boxes permitían cambio de neumáticos y el surtimiento de carburante.

Los motores utilizados eran V8 limitados a 18000rpm.

Los puntos serían otorgados a los ocho primeros en cruzar la meta el domingo de la siguiente forma: 10, 8, 6, 5, 4, 3, 2 y 1.

Clasificación

El ambiente en la sesión clasificatoria era equiparable al de un partido de fútbol, cada vuelta de Alonso era animada con cánticos comparables a una Final, y la «hinchada visitante» también se quería hacer notar. Así pues cuando Alonso batió el tiempo de Schumacher en la Q1, parecía que había ganado la carrera. Poco importaba a la grada que los eliminados fueran: 17º Scott Speed; 18º Tiago Monteiro; 19º Christijan Albers; 20º Takuma Sato; 21º Franck Montagny; 22º David Coulthard, este último sin vuelta.

Empezaba la Q2 y esta vez fueron los fans del Kaiser los que celebraron el «minitriunfo». Se esperaba una carrera emocionante por la parte de las gradas. Schumacher puso medio segundo por medio de él y su máximo rival, Alonso. Aunque los aficionados del circuit, rojos y azules, celebraron que uno de los rivales cayera en esta sesión. Juan Pablo Montoya, con el McLaren, no conseguía entrar a Q3. Los otros eliminados eran: 11º Mark Webber; 13º Nico Rosberg; 14º Jacques Villeneuve; 15º Christian Klien; 16º Vitantonio Liuzzi.

Con el 1-1 en el marcador del duelo Alonso-Schumacher la afición local explotó de alegría al ver a Fernando Alonso poner su Renault en primera posición y a su compañero Fisichella batiendo al Ferrari. El asturiano no solo tenía la Pole, su rival saldría tercero. El resto de los pilotos poco pudieron hacer pues la vuelta de los de arriba era de 1:14 mientras que el que más cerca estuvo hizo 1:15.4. Así pues el resto de la parrilla era: 4º Felipe Massa; 5º Rubens Barrichello; 6º Ralf Schumacher; 7º Jarno Trulli; 8º Jenson Button; 9º Kimi Räikkönen; 10º Nick Heidfeld.

Carrera

Los dos Renault hacían una salida impecable y los dos Ferrari se situaban justo detrás. Kimi protagonizaba una espectacular salida pasando de la 9ª a la 5ª posición. Empezaba la primera de las 66 vueltas en las que, gracias a estar en la pelouse, me iba a tener que subir a la valla del Circuit para ver más cerca la acción.

Las vueltas pasaban y la distancia entre los Renault y los Ferrari aumentaba, aunque se sabía que Michael iba más cargado para intentar volver a hacerle un adelantamiento estratégico a Fernando. El asturiano marcaba de morado todos los parciales y sus aficionados vibraban de emoción. Se acercaban las paradas mientras por las pantallas gigantes veía un trompo de Takuma Sato (vuelta 10).

La pelea por detrás de los Toyota nos dejaba a Ralph con el alerón roto. Veíamos pasar a ese Toyota peleandose para llegar a los boxes. El primero de los favoritos pararía después, Fernando iba a boxes y saldría 4º sin tráfico. La marea azul empezaba a empujar pues Fisichella también paraba y los Ferrari se ponían al frente. Justo en ese momento Montoya hacía un trompo que le dejaba en medio de la pista parado y creaba incertidumbre. Un Safety Car podía hacer que la estrategia de Schumacher fuera la acertada. Paraba Massa en ese momento. Los comisarios retiraron el McLaren de pista sin necesidad del coche de seguridad, con mucho valor.

Fernando se encontraba con doblados y tenía incluso que echar la bronca a Tiago Monteiro. Ferrari programaba su parada en la vuelta 23 y ponía al 7 veces campeón del mundo por delante de Fisichella. Los aficionados de Schumacher rugían como nunca en ese momento. Una vuelta más tarde, la «Marea Azul» se encogía al ver por las pantallas un alerón de un Renault por fuera de pista en la curva 3. El murmullo de alivio al ver que se trataba de Fisichella y no de Alonso fue generalizado entre la afición local, pues se quería celebrar la victoria de Fernando y esto no ayudaba.

El número 1 entraba a boxes después de poner más tiempo entre él y el kaiser. Salía justo delante de Massa y eso significaba que no tendría al brasileño haciéndole tapón. Una vuelta más tarde entraba Fisichella. Schumacher tenía que apretar para poder salir delante pues la diferencia solo era de 8.7s y el Ferrari tenía que hacer su segunda parada.

Felipe Massa entraba a falta de 23 vueltas y salía justo detrás de Fisichella. Michael volaba pero no conseguía el tiempo necesario para salir delante de Alonso cuando hizo su parada a falta de 20 vueltas. Después de eso, el asturiano empezó otra vez a poner tierra de por medio.

Las últimas vueltas sirvieron para agrandar la diferencia entre los dos campeones del mundo. Fisichella seguía tercero y Massa cuarto. Los mecánicos se metían en el muro para celebrar la victoria y la grada estallaba mientras Alonso se permitía saludar a la grada y hacer los «pajaritos».

La grada era una fiesta viendo la llegada a meta de Alonso. Los «derrotados» felicitaban a la «Marea Azul» y todo el circuito se rendía al vencedor. La primera vez que un español ganaba en casa no iba a tener otra celebración que no estuviera a la altura. Siempre se me quedará grabado la imagen de Alonso bailando sobre el R26 debajo del podio a escasos 400 metros de mi posición.

Repercusión

Alonso ponía más distancia en la general con Schumacher y demostraba que podía batir al alemán con superioridad. Esta victoria pasó a la historia por ser la primera de un español en casa y la 11ª de una leyenda del automovilismo como es Fernando. Renault también sacaba petroleo en el Campeonato de Constructores.

Por su parte McLaren se veía como claramente la tercera escudería y Montoya no acababa de arrancar este año. La guerra de los británicos parecía más con Honda y Toyota pues los dos constructores japoneses seguían dando pasos adelante.