La Fórmula 1 ha dejado ya en el recuerdo un GP de Singapur que deja a Lewis Hamilton como gran candidato al título. Lo mejor que está viendo la competición esta temporada es que Sebastian Vettel ha pasado de ser el mejor a ser el piloto que más falla en cuestión de carreras. El inglés está 40 puntos por delante y quiere ganar todas las carreras que quedan. 

El Gran Premio de Singapur ha sido el fin de semana que ha reafirmado el hundimiento de Ferrari y ha dado aún más ánimos a un Lewis Hamilton y Mercedes que ven que sin tener errores, están siendo capaces de llevarse victorias y abrir diferencias en el campeonato de pilotos. El gran problema del ‘cavalino rampante’ es que cuando arriesgan les sale mal y cuando no lo hacen, también. Ferrari ha pasado de ser el gran favorito al título a ser el pobrecito que no está acostumbrado a ganar.

Sebastian Vettel parece ver como su moral cae a marchas forzadas, mientras que Hamilton se corona carrera a carrera de buenas críticas y de positivismo. 40 puntos de ventaja en el campeonato son suficientes para empezar a plantear que Mercedes puede tener un error y seguir líder sin mayores problemas, cosa que Hamilton prefiere no pensar.

El inglés cree que el equipo no ha tenido suerte de no tener errores, simplemente se enorgullece del trabajo hecho: «No le miro y pienso ‘hemos tenido suerte’. Cuando Vettel chocó contra el muro el otro día, dañó el coche y perdió tiempo en pista, eso no es que tengamos más suerte. Me enorgullece mucho no ponerme en esas situaciones«.

La gran baza que está teniendo Mercedes es mirar por ellos mismos, agachar la cabeza y trabajar carrera a carrera: «No perdemos el tiempo preguntándonos qué están haciendo, o si sienten presión, o si se sienten felices o infelices. No hay nada que podamos hacer respecto a ellos, todo lo que podemos hacer es ser lo mejor que podamos durante un fin de semana«.

El enemigo a evitar para Mercedes ahora mismo es la soberbia. El equipo alemán no se puede confiar y eso mismo es lo que avisa Hamilton: «Estoy seguro de que se irá de aquí tras un fin de semana difícil y volverán más fuertes. Pero puedo aseguraros que, como equipo, no somos arrogantes ni excesivamente confiados. Estamos siendo diligentes y trabajamos lo máximo que podemos. Queremos seguir luchando como lo estamos haciendo«.

De hecho, el inglés va un paso más allá y, como campeón que es, no se conforma con segundas posiciones y jugar a la defensiva. Hamilton tiene como objetivo ganar todas las carreras que quedan: «En mi opinión, necesito ganar cada carrera. Me concentro en eso y llego queriendo ganar. Habrá fines de semana en los que sepamos que tal vez somos más fuertes y habrá otros, como este, en los que esperemos estar por detrás, pero aún creamos poder ganar. Quiero ganar todas las carreras, ese es el objetivo».