Hoy el equipo Marussia ha hecho oficial un comunicado en que se anuncia el estado del piloto Jules Bianchi, quien sigue hospitalizado inconsciente en Japón después del fuerte accidente de la carrera de Suzuka. El piloto francés sufre una grave lesión cerebral que afecta a todas las funciones.


Hoy ha llegado la peor noticia que podía llegar. Después de tres días con todo el mundo volcado en dar ánimos a Jules Bianchi, los médicos han presentado un pronóstico muy reservado. Y es que Bianchi sufre una severa encefalopatía.

A través de un comunicado del equipo Marussia, se ha confirmado que el piloto sufre una lesión axonal difusa. Esta lesión es debida a una fuerte desaceleración del tejido cerebral. A causa de la desaceleración, la materia más densa, correspondiente a las conexiones neuronales, se desplaza hacia el exterior produciendo una severa cadena de disfunciones. La lesión no se localiza ninguna zona concreta, pues la desaceleración de impacto la recibió el cuerpo en su totalidad. Pueden haber algunas regiones más afectadas que otras, pero las conexiones se han dañado y el pronóstico es muy reservado.

A juzgar por las imágenes que estos días circulan por internet, el coche se para en aproximadamente tres metros llegando a más de 200 km/h. Bianchi sufrió una desaceleración muy exagerada – se habla de 50G -, pero la recuperación no es imposible; el tejido no ha muerto. Aun así las secuelas serán inevitables y una recuperación de la consciencia no es un hecho probable, aunque el piloto se mantenga estabilizado. El tejido cerebral no es capaz de regenerarse por si solo.

Ahora por ahora hay que esperar a más conclusiones de los médicos para salir de indagaciones. Evidentemente quienes tratan con el francés son los expertos y tienen mucha más información a mano que ninguna otra persona. Esperemos que en los próximos días puedan anunciar buenas noticias.

Mientras, la comunidad del automobilismo pensará en Jules Bianchi y en como no se lo merecía. La FIA ya ha pedido una investigación sobre el incidente. Esperamos recibir buenas noticias pronto. Ánimo, Jules.