Hay suficiente evidencia para demostrar que el salto de Moto2 a Moto3 no es fácil. Campeones como Sandro Cortese, Danny Kent y Álex Márquez han tenido dificultades para pelear cosas importantes en esta categoría, así como numerosos otros casos.

Un caso particular es el de Thomas Lüthi, que ha ganado desde su segunda temporada en Moto2 y siempre ha estado oscilando el top 5 del campeonato. Sin embargo, acumuló más de 120 carreras en la categoría y apenas con 30 años, el año pasado, luchó el campeonato de Moto2.

Pero Brad Binder viene de simplemente aplastar en el campeonato en Moto3, ganando el título matemáticamente cuatro carreras antes de concluir el campeonato. Finalizó con 319 puntos, frente a los 177 de su rival más cercano ¡Impresionante!, por supuesto, todos podemos tener grandes expectativas del joven piloto sudafricano de KTM.


Sin embargo Binder en sus declaraciones ha mostrado con cierta modestia:
«Puede que no sea en el primer o segundo año, pero estoy convencido de que llegaré a la cima algún día. Honestamente, sólo quiero trabajar duro».

Binder a la edad de 21 años, mostró principalmente una virtud: madurez.

«Honestamente, lo que hizo la diferencia es que tengo el equipo más increíble detrás de mí. Es una estructura grande, todo funcionó muy bien y todo el mundo ha trabajado muy duro. Nunca he comenzado una carrera con dudas sobre nada.«

 

Este año luchará el campeonato contra Lüthi, Morbidelli, Nakagami, Álex Márquez y tal vez Baldasarri o por qué no, Fabio Quartararo.