Mercedes ha anunciado esta mañana que el director de ingeniería, Aldo Costa, y el director de rendimiento, Mark Ellis, dejarán la marca a finales de año. Estas son las primeras consecuencias de un equipo que ha pasado de tener el dominio exclusivo de la generación híbrida a luchar cara a cara contra Ferrari y sudar pasa conseguir una victoria.

Es evidente que Mercedes se ha visto igualado este año por los italianos y, en lo que hasta ahora era un prado de felicidad, han empezado a crecer nubarrones en el horizonte. Los alemanes se han acostumbrado a no tener excesivos problemas en la lucha por el título, pero este año han visto como Ferrari tiene un monoplaza tan o mejor que el suyo, por lo que las reacciones del equipo no han tardado en salir a flote.

Aunque la salida de ambos directores se hará efectiva a final de temporada, es evidente que salen señalados de la fabrica. El director de diseño John Owen será el sucesor de Costa y el director de aerodinámica del monoplaza, Loic Serra, sustituirá a Ellis.

Ambos ingenieros son reconocidos profesionales del mundo del automovilismo con un gran bagaje a sus espaldas. Ellis forma parte de la escudería germana desde 2014 con la que ha conseguido cuatro mundiales de pilotos y de constructores. Además había sido jefe de ingenieros de Red Bull, de Honda, de Bar y de Jaguar, donde empezó su andadura por el mundo de la F1.

Costa, por su parte, es una de las personas más importantes de la escudería. Ingresó también en 2012 proveniente de Ferrari donde había estado desde 1996 y que había sido desde jefe de la oficina de diseño hasta director técnico de la ‘scuderia‘.

En Mercedes se avecinan tormentas, la lucha por el título no va a ser tan sencilla como los últimos años. El equipo necesita estar centrado y luchar en todas las carreras para lograr más puntos que Ferrari y llevar el quinto mundial consecutivo a las vitrinas de Brackley.